Buen partido del filial maño en la nublada mañana de domingo en la Ciudad Deportiva del Real Zaraogza, ante un rival peligroso como el Tarazona, que la pasada jornada goleó al Ejea por 4-0.

Mañana de reencuentros en las instalaciones de la carretera de Valencia, ya que el rival del Deportivo Aragón acumulaba hasta ocho exjugadores que militaron en sus filas.

De entrada, destacar el planteamiento táctico de César Laínez al jugar con solo tres defensas y poblar el centro del campo para dominar esa zona, y no dejar crear y pensar al centro del campo rival.

Le salió bien la jugada al técnico zaragocista, ya que tras unos minutos de igualdad, el Deportivo Aragón se hizo dueño y señor del centro del campo y empezó a crear ocasiones claras de gol, además de presionar muy arriba la salida del balón del equipo contrario y dificultar mucho su fútbol.

Fruto de esta presión, llegó un cambio de orientación con ventaja para Buenacasa, que se adentró en el area y fue derribado claramente, transformando Pombo el penalti en el primer gol del partido apenas transcurrido el primer cuarto de hora.

Siguió la misma tónica y poco después, un buen pase de Carlos Nieto dejó a Xiscu solo delante de Monsalvo para subir al marcador el segundo gol en el minuto 31.

No acertaba el Tarazona a contrarrestar la presión de los locales, y se veía incapaz de llegar al área del Aragon, y cuando se acercaba, Jorge "Guti", Daniel Lasure y Julián Delmas, con el apoyo de Jesús Bernal, abortaban cualquier situación de peligro.

Se llegó al final de la primera parte con el mismo argumento, y el filial zaragocista aumentó su renta tras un córner rematado por Delmás que paró bien el portero turiasonense, pero Aparacio recogió el rechace para llevar el balón a la red y subir el 3-0 al marcador, minutos antes del final de la primera parte.

Comenzó la segunda parte y se produjo el cambio de Zalaya por Xiscu, con lo que el Aragón volvió a defensa de cuatro. A pesar de este cambio táctico, no cambiaron las cosas en el terreno de juego y el equipo dirigido por César Laínez siguió siendo superior. 

Contabilizar hasta tres clarísimas ocasiones de Buenacasa, que de haberse materializado hubieran dado por resuelto el marcador del partido.

A falta de 20 minutos para terminar el encuentro, una entrada a destiempo de Delmás fue sancionada por el árbitro con la segunda amarilla, y dejó al conjunto blanquillo con un jugador menos. El Tarazona entonces adelantó lineas y encerró al Aragón en su campo, con poco juego pero mucho balón en el área. Y fruto de ello, en el minuto 75, Guille Alonso redujo el marcador y llevó la inquietud a las filas zaragocistas.

Continuó la presión del equipo de David Navarro, expoleado por su público, que acudió en buen número a las instalaciones del Real Zaragoza, y no dejó de animar a su equipo. En el minuto 85, otro ex de la casa, Carlos Javier, redujo todavía más las diferencias y propuso cinco minutos de gran tensión hasta el final del patido, con un Tarazona volcado al ataque y un Aragon que supo sufrir y defender la renta que había conseguido durante tres cuartos de partido hasta la expulsión de Delmás.

En resumen, buen partido y buen planteamiento del filial, hasta la jugada clave de la expulsión de Delmás. A partir de ahí, trabajo, sufrimiento y sacrificio para sacar merecidamente el partido adelante.

Por parte del Tarazona, superado durante tres cuartos del partido, sólo salió a relucir su potencial ofensivo cuando se encontró con un jugador más.

El proximo encuentro del Deprotivo Aragón será en el campo del Illueca el 6 de noviembre.