El Real Zaragoza ha vencido por tres goles a dos a la SD Huesca en El Alcoraz. A pesar de la incertidumbre de si se podía disputar el encuentro o no por el estado del terreno de juego, finalmente, ambos conjuntos se han enfrentado en un escenario que no estaba en condiciones. Por ello, los dos equipos han tardado en adecuarse a la situación.

Los oscenses presionaban a la defensa zaragocista y ha tenido alguna ocasión para adelantarse en el marcador. El conjunto blanquillo intentaba sorprender al equipo de Anquela con el contragolpe, pero sin éxito. En la segunda mitad llegarían los goles. El Huesca golpearía primero tras un gol de Borja Lázaro. La alegría le duró poco a los azulgrana ya que Dongou pondría las tablas en el marcador después de un error de Sergio Herrera.

El equipo maño se lanzó al ataque y logró anotar el segundo con un zurdazo de Ángel. Y el tercer tanto lo marcaría, de nuevo, el camerunés. Antes de la conclusión del partido, Alexander recortaría distancias con el segundo gol para la SD Huesca.

Raúl Agné ha hecho su valoración del encuentro: “Después de ganar digo que es un partido que no se tenía que haber jugado. Hemos demostrado que somos un grupo con carácter que se esfuerza y nos hemos adaptado ante un rival que nos lo ha puesto difícil”.

“La actitud del equipo ha sido muy buena”

Además, el técnico blanquillo ha hecho un guiño a la afición desplazada a Huesca, reconociendo y valorando la importancia para el equipo. “Estoy encantado por toda la gente que se merece esta victoria”, afirmaba.

Ambos conjuntos aragoneses llegaban al choque en una situación crítica y necesitados de puntos. “No quería el empate. El Huesca me parece un buen equipo con físico y duro. Nos han marcado en el último minuto, pero a los míos no les puedo pedir nada más”, ha comentado Agné.