Segunda derrota consecutiva del Real Zaragoza. Esta vez en La Romareda ante el Sevilla Atlético por 1-2.  El gol de falta indirecta dentro del área de Edu García sirvió para empatar, pero no para ganar. En el descuento del partido, una falta lejana provocada por Marcelo Silva, que supuso su expulsión por doble amonestación, acabó en gol. Saja rechazó el balón y Cotan no desaprovechó el regalo del guardameta blanquillo. Javi Ros reconoció que "estamos muy fastidiados pero no nos queda otra que levatarnos de este golpe".

"Nos ha costado mucho y no hemos podido", resumió el centrocampista. La primera parte fue de dominio sevillista, el Zaragoza no entró bien al partido y no dio síntomas de recuperación hasta después del descanso: "Sabíamos que ellos tenían mucha calidad, nos han forzado a meternos atrás. En la segunda parte más por empuje hemos conseguido el empate, pero no hemos estado bien". La situación del conjunto aragonés se ha complicado. La promoción ya está olvidada y el descenso cada vez está más cerca. El equipo necesita una reacción si no quiere sufrir para mantenerse en Segunda División. Javi Ros dijo que "es momento de hacer autocrítica y a partir de mañana a preparar el partido de la semana que viene".

El primer gol del filial hispalenses viene precedido por varios fallos defensivos consecutivos. El segundo, es digno de una tragicomedia: "Una vez más con muy poco nos vuelven a hacer gol", afirmó el centrocampista.  Con cinco minutos de añadido, el Zaragoza no fue capaz de anotar ningún gol. Además, la expulsión de Ondoa obligó a un jugador de campo a actuar como portero durante estos minutos: "Con la expulsión del portero se nos había puesto todo a favor. La consigna desde el banquillo era tratar de colgar balones y tirar a puerta porque el portero en ese momento era un jugador de campo, pero lo hemos gestionado muy mal".