Aleix Febas se unió a la disciplina zaragocista tras haber rendido en las dos últimas temporadas en el Real Madrid Castilla a un gran nivel. Sus actuaciones despertaron la atención del conjunto aragonés y de otros equipos de Primera y Segunda División que también quisieron hacerse con sus servicios. Sin embargo, fue el Real Zaragoza quien consiguió obtener su cesión tras haber realizado un importante esfuerzo económico por él y prometiéndole que sería una pieza muy importante en la maquinaria maña para que pudiera seguir creciendo como futbolista. En lo que va de campaña el ilerdense ya ha disputado un total de 1.507 minutos con la elástica zaragocista, partiendo como titular en dieciséis encuentros.

Asombroso inicio

Tras una pretemporada en la que Natxo González trató de buscarle acomodo en el centro del campo, el inicio del joven y prometedor futbolista fue espectacular. Aleix sobresalía en el campo gracias a una facilidad pasmosa en dejar a los rivales atrás, una gran rapidez en la conducción y manejo del esférico y una visión de juego que muy pocos jugadores tienen en esta categoría. Posee un tren inferior que le da un plus de velocidad en sus arrancadas, haciendo que pueda superar de un plumazo a sus adversarios. La única forma que tenían los jugadores contrarios de frenarle era a través de faltas, convirtiéndose durante varias jornadas el futbolista que más las recibía por partido. Concretamente en las siete primeras jornadas ligueras recibió un total de veintisiete faltas. Sus buenas actuaciones llamaron la atención del seleccionador español sub 21, Albert Celades, quien le convocó a finales del mes de septiembre para disputar un encuentro con La Roja. Finalmente, Aleix fue uno de los descartes que realizó en el combinado nacional frustrando su debut.

 Toda la parroquia zaragocista, desde directivos, aficionados y cuerpo técnico, estaba encantada con el rendimiento que aportaba el ilerdense. Existía en La Romareda la sensación de que era uno de esos jugadores que, desgraciadamente, no se disfruta mucho en los últimos años por Zaragoza.

Bajón importante

Sin embargo, esta situación cambió con la llegada del mes de noviembre, donde el rendimiento de Aleix Febas descendió considerablemente. El jugador no fue de la partida en el derbi aragonés frente al Huesca, y, tras volver a recuperar la titularidad en la siguiente jornada, el joven catalán no ha vuelto a ser el mismo. Tampoco le ha ayudado el cambio de sistema que ha realizado Natxo González desde el partido en casa frente al Reus CF en busca de soluciones a la mala dinámica blanquilla. Aleix Febas ha pasado de ser un futbolista determinante, omnipresente en todas las jugadas de ataque del conjunto aragonés, a pasar completamente desapercibido y estar ausente en los últimos encuentros. Prueba de ello es que Aleix ha dejado de recibir tantas faltas y de provoca tarjetas amarillas como antes hacía. El entrenador del Real Zaragoza también es consciente del bache por el que atraviesa el futbolista. El pasado 15 de diciembre, en la rueda de prensa previa al choque frente al Albacete, comento: “hace dos meses Aleix era la leche y llamaba la atención, y ahora no está a ese nivel”. Sin embargo, el míster se mostró optimista en recuperar su mejor versión.

Sin duda uno de los principales objetivos para la vuelta de Navidad es recuperar al mejor Aleix Febas. Cuando el ex canterano madridista ha estado bien, el resto de sus compañeros ha rendido mejor, y la recuperación de Febas puede ser el impulso que necesite el Real Zaragoza para salir de la mala dinámica por la que atraviesa.  El de Lérida es una de las piezas más importantes del actual Real Zaragoza y gran parte de las aspiraciones del conjunto de la capital del Ebro pasan porque el futbolista vuelva a deslumbrar con la magia que atesora en sus botas y retome, como antaño, el peso ofensivo en los ataques blanquillos.