El Real Zaragoza tiene ante sí uno de los partidos más importantes de la temporada frente al Real Oviedo, dirigido por Juan Antonio Anquela. Aunque suene extraño, el conjunto blanquillo dispondrá de los cuatro centrales que posee en la plantilla para disputar el trascendental encuentro. El míster zaragocista tendrá la posibilidad de alinear la pareja de zagueros en la que más confíe, y sentar precedente para acabar con el baile de centrales que lleva produciéndose en el once del conjunto maño desde hace ya meses.

Simone Grippo

El central suizo se ha convertido en un fijo en los esquemas de Natxo González, siempre y cuando le han respetados las lesiones. Simone ha demostrado ser uno de los líderes del vestuario, y prueba de ello es que fue elegido como cuarto capitán. Siempre ha demostrado un compromiso y actitud que le han hecho contar con la confianza del técnico vasco. Además, el central no solo cumple en la parcela defensiva, sino que también aporta en el apartado ofensivo. Simone se ha convertido en un auténtico peligro en las jugadas a balón parado del Real Zaragoza, marcando tres tantos gracias a su poderío en el juego aéreo.

Mikel González 

El experimentado central vino con el cartel de titular indiscutible, y las expectativas puestas en el fueron muy elevadas. Sin embargo, las lesiones han hecho que tan solo haya podido disputar quince encuentros ligueros, acumulando siete minutos de juego en los últimos siete partidos. Tras recuperarse totalmente de su lesión será un activo muy valioso para Natxo González. Nadie duda de las cualidades que tiene el ex jugador de la Real Sociedad y, su veteranía le puede venir muy bien al Real Zaragoza en este tramo de temporada.

Bruno Perone

Desde su llegada a finales del mercado invernal, el ex jugador del Nástic ha sido titular en los tres partidos disputados desde su llegada. Además, ha coincidido que el Real Zaragoza no ha conocido la derrota en esos tres choques. El brasileño ha supuesto un soplo de aire fresco en la zaga, y es un jugador que por sus tributos puede convertirse en una pieza importante en Segunda División.

Diogo Verdasca

El joven jugador portugués es el central que más partidos ha disputado en lo que va de temporada, con un total de veintitrés encuentros contando liga y copa. Sin embargo, Diogo se ha visto beneficiado de las lesiones que han sufrido tanto Mikel como Grippo, y no ha tenido muchas oportunidades de competir por un puesto de titular estando todos los centrales del equipo maño disponibles. El defensa central ha demostrado tener cualidades suficientes para ser un gran central, pero necesita coger experiencia y corregir ciertos errores propios de su edad.

Con todos los jugadores en plenas condiciones, Natxo apostará por la pareja de centrales que considere la titular. A priori la dupla que más confianza puede generar es la formada por Grippo y Mikel González. Sin embargo, el buen hacer de Perone en los tres últimos encuentros ligueros le fortalecen como titular, y es previsible que forme de la partida frente al Real Oviedo. Tampoco se puede descartar a Verdasca, quien luchará por hacerse con un puesto en el once.

Difícil puzle el que debe resolver el míster blanquillo. La capacidad de Natxo para solventar este bendito problema supondría un impulso para el Real Zaragoza, otorgando una mayor estabilidad al equipo y acabando con el baile de centrales que se lleva produciendo en el conjunto de la capital del Ebro en lo que va de temporada.