Recuperando su mejor versión, el madrileño volvió a echarse a la Sociedad Deportiva Huesca a sus espaldas para liderar todo el juego de ataque. Muy activo y generoso con sus compañeros, dio dos asistencias de gol en el encuentro a su ex equipo para encarrilar una victoria que estuvo en riesgo hasta los minutos finales pero que acabó llegando para alivio de todos. Acabó el encuentro exhausto y fue reemplazado en la recta final por Juanjo Camacho, recibimiento una cálida, sincera y merecida ovación por parte del público asistente a El Alcoraz, que le dio "alegría". Autocrítico consigo mismo, Samu confesó que "ya le tocaba hacer un buen partido en casa" y que el equipo sabía "que teníamos que hacer las cosas bien" para poder ganar en casa y frenar su mala dinámica como local en lo que va de año.

Analizando el encuentro, el atacante aseguró que "en la primera parte hemos metido mucha intensidad y ritmo" y la complejidad fue que "hacía calor y teníamos a un muy buen rival como el Sevilla Atlético". Pasando página afirmó que "hemos tenido un mes muy malo" pero ahora "con dos victorias seguidas estamos despertando" y ahora deben "seguir sumando".

Pese a mostrar sobre el verde un rendimiento inferior durante las primeras jornadas del nuevo año, Sáiz reconocía que "nunca he dejado de trabajar" y que ahora "vuelvo a sentirme bien" creyendo "que el equipo ha hecho un partido fenomenal" aunque "lo importante son los tres puntos", que permiten respirar a un conjunto oscense que acabará la semana en la mitad alta de la tabla.

Respecto al rival del próximo fin de semana, el Elche, Samu reconoció que es "un rival muy complicado" que viene de ganar en Lugo, pero el vestuario afronta con ilusión la visita al Martínez Valero y se encuentra "con ganas de sumar algo allí" y poder conseguir su tercera victoria consecutiva, que sería "una pasada”.