El entrenador de la Sociedad Deportiva Huesca atendía a los medios de comunicación antes de partir rumbo a Asturias para, previo entrenamiento en la Ciudad Deportiva del Real Sporting de Gijón, descansar y afrontar el partido que les medirá con el Real Oviedo el próximo viernes a partir de las ocho de la tarde. Sobre el conjunto carbayón Juan Antonio Albacete Anquela aseguraba que visitarán "un campo de Primera División" para jugar "ante un equipo que es de lo mejorcito de la categoría", por eso necesitarán competir y trabajar mucho durante noventa minutos si quieren regresar con algún punto en su equipaje una vez finalizada la contienda.
Sobre el desarrollo del encuentro, el míster jienense vaticinó que "vamos a sufrir como perros" porque "el Oviedo tiene mucho poderío en cualquier faceta de su juego", circunstancia que les obligará a "saber sufrir y jugar al fútbol", dejando claro y afirmando que "si sólo vamos a defender no tendremos nada que hacer".
"Estamos ante la oportunidad de nuestras vidas"
La importancia del encuentro es histórica para el conjunto altoaragonés. A falta de siete semanas para la conclusión del ejercicio, una victoria les auparía a la zona de promoción de ascenso de la que quién sabe si saldrían hasta el final. Consciente de ello, Anquela confirmaba que “estamos ante la oportunidad de nuestras vidas" ya que "son tres puntos muy importantes y tenemos que ir a buscarlos y pelear por ellos". La ilusión no puede morir hasta que el colegiado decrete el final, afirmando que pelearán y competirán sin sentirse inferiores a nadie e intentando plasmar su valentía en el terreno de juego.
Su vestuario no es el mismo que comenzó la temporada. "Este equipo se ha vuelto exigente", aseguraba un Anquela que se sentía agradado con la ambición que se respira en la plantilla. Reconoció ante la prensa que el empate del pasado sábado ante el Cádiz Club de Fútbol sentó muy mal a un grupo de futbolistas que tenía en sus manos tres puntos más que valiosos. "Esa ambición y esas ganas te convierten en un ganador y nosotros queremos ganar", aseguraba el preparador jienense que también está exigido y se enfrenta al reto de llevar al Huesca a la promoción de ascenso. "Estoy muy orgulloso de ser el entrenador de este equipo y de dirigir un grupo como éste", afirmaba el míster que no se da por satisfecho pidiendo "apretar todos los días" porque si se conforman "no llegaremos al nivel que se requiere”.