El Oviedo empató en la tarde del domingo ante el Caudal de Mieres, cerrando una mala temporada. Sobre el partido ha dicho lo siguiente: "Fue un partido en el que nos costó tener continuidad y tranquilidad en el juego, pero que con el paso de los minutos ya estuvimos mejor, con dominio en campo rival y llegadas al área rival. La segunda parte fue más local, especialmente en los últimos minutos en los que se rompió el partido, que se pudo haber decantado para cualquier lado".

El entrenador del equipo carbayón ha querido valorar la temporada entera y su estancia como entrenador del primer equipo: "En los últimos días estuve pensando varias cosas de mi trayectoria en el primer equipo. Intenté que se viera un equipo diferente al anterior, con personalidad e intensidad durante los partidos". Achacó, en parte, la falta de regularidad como uno de los factores que han hecho que el Real Oviedo no esté en los playoffs de ascenso: "No hemos conseguido encadenar tres victorias durante la temporada y si analizamos las situaciones hay un componente de suerte y otro de futbol. No hubo continuidad y no se consiguió el objetivo".

Robles también hizo autocrítica: "Asumo la responsabilidad y no me escondo ante nada ni nadie. Tengo que aprender y mejorar cosas. Soy un empleado del Real Oviedo, me hice cargo del equipo con toda la ilusión del mundo. Los que estamos dentro del club tenemos que mirar por él y no servirnos de él. Estoy a disposición del Consejo de Administración y de Joaquín del Olmo y aceptaré la decisión que tomen".

Por último ha hablado sobre lo que hará el equipo una vez finalizada la temporada: "El equipo va a seguir entrenando durante los próximos días, no se puede parar y dar dos meses de vacaciones".