Los planes de Juan José Hidalgo Acera parecen truncarse. Hace unas semanas se confirmaba la disolución de la Unión Deportiva Salamanca y los derechos federativos quedaban a la venta. El empresario, que semanas antes había explicado su proyecto y estaba decidido a comprar la plaza, esperó a unos días después de la subasta para adquirirla, puesto que consiguió una rebaja a la mitad del primer precio establecido.
Los administradores concursales y el Juzgado de Salamanca aceptaron la venta a la empresa ‘Desarrollos y Proyectos Monterrubio SL’, propiedad del propio ‘Pepe’, pero la denuncia interpuesta por los futbolistas ante la AFE por impagos ha prosperado, provocando el descenso. Esto provoca que, en caso de que la Federación acepte el trámite y ceda los derechos federativos, el nuevo equipo fundado tenga que empezar en Tercera División.
Pero todavía queda por batallar. El auto judicial emitido ayer desde Salamanca asegura que la plaza comprada está totalmente libre de cargas, de tal manera que no afectarían los impagos a la plantilla. Según el mismo, la plaza es de Segunda División B, de tal manera que será en el Juzgado donde se resuelva el hecho, ya que a Hidalgo le aseguraron que no había opción de descenso administrativo.
El Salmantino también desciende
Por otra parte, el filial también descendería. El Salamanca B, que militó la pasada campaña en el séptimo grupo de Tercera División y logró la permanencia, bajaría de categoría en caso de que lo hiciera la UD Salamanca, ya que no pueden estar en la misma división. A esto se suma que los futbolistas de la cantera también denunciaron por impagos, lo que provocaría este descenso asegurado de la misma manera.
También hay lío en este apartado, ya que la cantera quedó desligada de la entidad desaparecida, de tal manera que es también una nueva independiente, llamada ‘Fundación UDS’, y libre de cargas de la misma manera. Falta por saber la última decisión del juzgado, pero la AFE tiene claro que las plazas tienen que descender a la categoría inmediatamente inferior.