Duelo matinal de verdes. Un Coruxo en pleno clímax dentro de la temporada, recibía a un Guijuelo que está pasando una dura penitencia en forma de temporada. En esta caso la lógica no se impuso y los pupilos de Jordi Fabregat se llevaron el gato al agua y vencieron con contundencia a los gallegos en un choque que tuvo poca historia a partir de los 23 minutos de juego.

Salida en tromba de los salmantinos

Comienzan a apretar los de abajo, llegan las jornadas decisivas y el abismo está cerca. Así, el Guijuelo se puso el mono de trabajo y saltó a un soleado tapete vigués en busca de tres puntos necesario para engancharse al tren de la permanencia.

Pronto aviso con protagonismo para Dimas a los dos minutos de juego pero el atacante no fue quien de batir a Alberto Domínguez. No avisaría más. El ariete insular controlaría un cuero ante la oposición de Alberto García y, tras girarse, sorprendería al meta gallego para poner el primero en el marcador. Soltaba toda la rabia en la celebración; una rabia acumulada tras un año complicado.

En el proceso de asimilación llegaría Antonio Pino para unirse. Tras una pared con Carmona y zafarse de un desafortunado Rubén González, pondría un preciso balón para la llegada de Jonxa que, a portería vacía, anotaba el segundo para los visitantes. Los de Fabregat disfrutaban sobre el verde y se comenzaban a creer la posibilidad de llevarse los tres puntos a tierras salmantinas.

La estocada final llegaría apenas tres minutos después cuando una pérdida por parte de Rubén, finalizó con un potente remate desde fuera del área por parte de Pepe Carmona -gol 500 del Guijuelo en la 2ºB- al que poco pudo hacer Alberto Domínguez para evitar el tercero en el electrónico.

A partir de ahí, los visitantes dieron marcha atrás y cedieron el protagonismo a los vigueses. Campillo y Antón de Vicente no acertaron ante la meta de Kike Royo. Un meta que tuvo que repeler un remate de Mateo al filo del descanso.

Pedro Vázquez maquilla el resultado

Sin nada que perder, Rafa Sáez dio entrada en el descanso a Cubas, Osterholm y Beltrán. El cuadro local notó sus ingresos y disfrutó de más posesión del cuero y mayor presencia en ataque.

A pesar de ello, Antonio Pino puso a prueba -tras un fallo en la zaga- los reflejos de Alberto Domínguez que, por bajo, desvarató la oportunidad. En pleno apogeo de oportunidades visitantes, Fabregat se lamentaba en el banquillo tras ver como Jonxa y Carmona no acertaban ante la meta local.

La respuesta no se hizo esperar. Un gran pase de Mateo a Cubas sirvió para que el de Marín cediera a Pedro que llegaba desde atrás y, con un certero remate, se encontrara con Kike Royo. Tras ello, el meta visitante se luciría con un remate de Campillo que se colaba en la escuadra.

Llegaría el gol en pleno asedio. Un buen centro de Pibe llegó a Pedro que, de cabeza, sorprendería al meta visitante que no podría hacer nada. Un gol que dejó un halo de esperanza para un Coruxo que lo intentó pero no fue capaz de volver a perforar la meta de Royo en los 25 siguientes minutos.

Añadido a los tres puntos, el CD Guijuelo retornó a tierras salmantinas con el retorno de Adrià Granell tras varios meses en el dique seco.

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Sobre el autor
Adrian Godar
Cubriendo el Coruxo experiencia en Galicia Confidencial y Galifútbol.