Los últimos partidos en la Segunda División B de Manny Alexander Rodríguez Baldera, más conocido como 'Manny', están marcando un punto de inflexión en su salto del Juvenil a la categoría de bronce del fútbol español, además de significar un golpe encima de la mesa propinado por un chico cuya ambición quiere derribar todas las paredes que se le pongan en medio. Llegado al filial en verano como uno de los pocos refuerzos extraídos desde el Juvenil DH como consecuencia de la sanción FIFA, el dominicano es el único de esa hornada de chicos jóvenes que se ha hecho con un hueco en el once inicial del Atlético de Madrid B.

Y es que ser titular en un equipo de Óscar Fernández, un técnico habituado a rotar y a meter variantes cada domingo en función del rival y la necesidad del juego que se proponga en ese partido, no es para nada sencillo. Manny ha arrancado desde el principio en las ocho últimas jornadas, algo que tan solo está al alcance del centrocampista Keidi Baré, una pieza clave en el esquema del técnico valenciano. Su buen rendimiento ha permitido que haya disputado 704 de los 720 minutos totales desde la décima jornada: solo fue sustituido contra el Coruxo (89’) y contra el Navalcarnero (75’).

Ha disputado 704 de los últimos 720 minutos y ha participado en cinco de los últimos goles del Atlético B

Manny ha roto con el rol de revulsivo que tenía en el arranque de la temporada. Debutó en la primera jornada, durante la victoria contra la Gimnástica Segoviana en la Ciudad Deportiva Wanda Atlético, teniendo diez minutos y no jugó su primer partido como titular hasta la cuarta fecha (82 minutos contra el Celta de Vigo B). Su papel en las nueve primeras fechas fue relativamente residual, disputando únicamente 221 minutos de un total de 810.

Centrado y comprometido con el Atlético B

Los datos demuestran que Manny se está doctorando en Segunda División B. Con mucho margen de crecimiento y de mejora, con la necesidad aún de pulir ciertos errores propios de su juventud, el exfutbolista de la Escuela Deportiva Moratalaz, admirador de Yannick Carrasco por su "velocidad, buen golpe y desborde", está siendo un recurso útil dentro del estilo de juego que propone Óscar Fernández. De sus botas nació el gol que significó el punto cosechado contra al Navalcarnero, después de asistir a Alberto Ródenas para marcar el primer gol del partido en el Mariano González.

Su papel está siendo fundamental en las últimas fechas hasta el punto de que ha participado en cinco de los últimos ocho goles marcados por el Atlético de Madrid B. Además de la mencionada asistencia contra el Navalcarnero, Manny asistió a Christian Perales para que marcara el gol del empate contra el Real Madrid Castilla en la undécima jornada y se estrenó como goleador contra el Coruxo una semana después. Contra la Ponferradina, en la decimocuarta jornada, provocó el penalti que convirtió Toni Moya desde los once metros y volvió a citarse con el gol rematando de cabeza una prolongación de Nico Schiappacasse contra el Talavera de la Reina en el último partido que el filial jugó en el mes de noviembre.

Manny renunció a debutar con la Absoluta de República Dominicana para no perderse un partido con el Atlético B

Las titularidades con el filial no son más que el premio a un buen rendimiento y a un indudable compromiso para con el equipo. Manny es de aquellos futbolistas que anteponen el colectivo a cualquier individualidad y la mejor evidencia es su renuncia a debutar con la Absoluta de la República Dominicana con tal de no faltar a un partido del Atlético de Madrid B. El seleccionador Orlando Capellino convocó a Manny para los dos compromisos amistosos que República Dominicana tenía contra Guatemala el 9 y el 11 de noviembre, lo que significaba que se perdería el partido contra la Ponferradina. Así las cosas, el futbolista dominicano renunció a la llamada – y a su más que posible debut como internacional – para estar disponible en la convocatoria de Óscar Fernández.