Tablas en el derbi vizcaíno que abría la jornada del grupo, desafiando en horario al ‘Clásico’, y que al menos no defraudó en cuanto a incertidumbre en el marcador y goles a los aficionados que de uno y otro equipo se dieron cita en Urritxe. Un choque donde los locales, necesitados de puntos para salir del descenso, llevaron durante más tiempo la iniciativa, pero terminaron cediendo a la ley de un viejo conocido como Edu Ubis, que pudo incluso infligir un daño aún mayor en los minutos finales del partido.

Precisamente el riojano era una de las cuatro novedades que presentaba Jon Pérez ‘Bolo’ en su alineación. Sin Luisma Villa, Dani López ni Aitor Ramos, baja de última hora en la convocatoria arenera, Ubis asumía la responsabilidad de reemplazar al tridente en un campo de sobras conocido, con la compañía de Héctor Escrich y la incorporación por las bandas de Zabaleta y Uranga, que intercambiaba posición con el reaparecido Aguiar.

Idéntico número de cambios con respecto a su último once efectuaba Aitor Larrazábal con el objetivo de regresar a la senda de la victoria. Además de Jon Villanueva en la portería, el exjugador del Athletic apostaba por Mikel Méndez en el eje de la zaga para devolver a Baqué a su puesto más habitual de mediocentro. Más adelantados, Dani Hernández por banda derecha y Muniozguren, enganchando con Obieta, tenían la misión de desequilibrar a una de las zagas más sólidas del grupo.

Tras unos primeros minutos sin dominador claro, con el balón surcando el soleado cielo zornotzarra, antes de cumplirse el minuto 15 llegaba la primera ocasión del partido para el conjunto visitante, cuando Txopi aprovechaba un despeje defectuoso de Olaortua para encarar a Villanueva. Afortunadamente para los azules, aparecía providencialmente el veterano Garmendia para salvar bajo palos el que hubiese sido primer tanto del partido.

Cabero tuvo que ser sustituido tras un golpe |FOTO:JB Monterrey
Cabero tuvo que ser sustituido tras un golpe |FOTO:JB Monterrey

El susto hizo espabilar al cuadro local, que a partir del minuto 20 comenzó a acumular acercamientos sobre el área rojinegra. Primero fue Obieta el que obligaba al cancerbero Company a lucirse; luego Baqué con un chut que se marchaba fuera; poco después Muniozguren con un remate que volvía a poner a prueba al meta del Arenas. Y entre tanta ocasión azul, el primer aviso del protagonista del partido, Ubis, con un remate que atajó Villanueva. Tanto fue el cántaro a la fuente que a poco de terminar el primer acto iba a ser el delantero de Deba el que abriese la lata, aprovechando la porfía de su compañero Obieta, que tras robar el balón a Bergara asistía al capitán azul.

El balón parado, decisivo

El gol espoléo aún más al conjunto zornotzarra, que no cejó en su empeño a pesar del paso por vestuarios. En el primer cuarto de hora del segundo acto Muniozguren disparaba fuera, luego Company impedía con sus pies que el remate de Obieta dentro del área acabara en gol, Zumalakarregi sacaba bajo la portería un cabezazo de Baqué que los locales reclamaron como gol fantasma, y nuevamente el meta valenciano tenía que intervenir al disparo lejano de Iker Seguín.

Sin embargo el Arenas iba a demostrar que no estaba de convidado de piedra, y, justificando sus registros goleadores, aprovecharía otra aparición de Txopi en el área para provocar el derribo de Méndez.  Ubis ejecutó el castigo engañando a Villanueva.

La reacción del Amore no se hizo esperar y ésta llegó en forma de estrategia. Un saque de banda de Garmendia fue peinado por Muniozguren para que Obieta la cruzara a bote pronto obteniendo merecido premio a su búsqueda del gol toda la tarde. El propio Obieta y Fiddes, al poco de entrar al campo, pudieron sentenciar el partido para los azules, aunque por desgracia para ellos fue el ex, Ubis, quien no iba a perdonar en otra acción ensayada, aprovechando la prolongación de su compañero Aguiar a un saque de esquina.

Con las espadas en todo lo alto, a falta de quince minutos, Larrazábal se la jugaba con un tercer delantero, Ibrahima, aunque en el tramo final pudieron ser los visitantes los que dieran el golpe definitivo. Otra vez Ubis, ¿quién si no?, veía como Villanueva evitaba su hattrick, y con ello que los tres puntos volaran a la Margen Derecha del Nervión. Un castigo quizá excesivo para los méritos de un Amore que deberá enmendar su racha negativa de resultados en su próxima visita a Las Gaunas; con los mismos deseos de sumar tres puntos el Arenas recibirá en Gobela a un enrachado Gernika en un derbi entre equipos al acecho de los puestos de privilegio.

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