El orgullo albaceteño encuentra premio en el descuento

Orgullo, garra e insistencia fueron los ingredientes con los que el Albacete Balompié ha cocinado la victoria más sufrida y trabajada de la presente temporada al vencer a un correoso Gernika por la mínima (3-2) que llegó a ponerse por delante en el marcador hasta en dos ocasiones.

La suma de estos tres nuevos puntos en el casillero no estuvo acompañada por un Carlos Belmonte abarrotado ni mucho menos con motivo, quizá, de la coincidencia horaria con el encuentro disputado entre el Atlético de Madrid y el Fútbol Club Barcelona o de la también posible resaca carnavalera presente en la capital manchega.

Inicio con sorpresa

Fueron los pupilos de José Manuel Aira los que realizaron el primer acercamiento al área rival gracias a una jugada por la derecha de Josán, quien volvía a la titularidad después de su suplencia en Sestao, que envió un balón al área que atrapó sin dificultades Altamira en el primer minuto de juego.

Al minuto siguiente se produjo otra nueva aproximación al área del Gernika por parte de los locales que neutralizaría la defensa visitante al despejar a saque de esquina un centro raso de Dani Rodríguez tras recibir un pase por alto de Álvaro Arroyo en una incorporación ofensiva que hizo el gallego aprovechando los espacios que generaban sus dos compañeros ubicados en el costado derecho.

La sorpresa se produciría a los cuatro minutos cuando, en una falta lateral votada por Carracedo, Enziondo remató con el interior de su bota derecha solo el esférico servido por su compañero para anotar el primer gol de la tarde en el Belmonte.

La ambición de los pupilos de Javi Luances no parecía quedar en ese momento cuando, de nuevo a balón parado, Enziondo volvió a poner a prueba a Tomeu Nadal al ejecutar una falta directa tocada por un compañero pero esta vez el portero balear despejó el balón de la portería local.

Empuje con recompensa

La reacción del Albacete al mazazo inicial fue constante y estuvo marcada por un empuje ofensivo que careció de multitud de ocasiones de gol pero sí lleno de centros desbaratados tanto por los defensas como por el portero visitante acompañados de saques de esquina habituales.

La excepción a este ritmo que adquirió el partido la puso Madrazo primero con un disparo que ejecutó escorado en el pico derecho del área local que obligó a Nadal a volver a intervenir y despejar el balón a córner y después Pradera a la media hora de encuentro con un disparo lejano al que Nadal respondió deteniendo el balón sin problemas.

En el minuto 25, el alcarreño Diego Manzano se tuvo que retirar lesionado del terreno de juego por un golpe que sufrió en la rodilla y ante el imprevisto Aira decidió dar entrada a Modesto Acosta en el campo.

Luaces también tuvo que solventar un problema de este tipo minutos después cuando, poco antes del descanso, sustituyó a Abaroa y dio entrada a Iñigo Muñoz, quien pudo convertirse en el héroe de su equipo en la recta final de partido.

El primer remate a puerta del Albacete llegó en el minuto 42 en una jugada embarullada en la que se pidió penalti sobre Dani Rodríguez y el balón suelto lo recogió Rafa Gálvez entre protestas de sus compañeros pero su disparo se estrelló en el cuerpo de Altamira.

Josán y Acosta se asociaban continuamente para desbordar a la defensa del Gernika por la derecha pero sus envíos seguían siendo neutralizados pero fue Fran Carnicer con un centro preciso al área el que dio con la tecla al conectar con la cabeza de Aridane para que el ariete canario rematara picado al fondo de la red.

Mazazo psicológico breve

Altamira, de camino a los vestuarios, pagó su impotencia por el reciente gol encajado con algunos aficionados locales sentados en el fondo norte del Belmonte haciéndoles gestos que, al parecer, provocaron el enfado de los mencionados espectadores locales y la recriminación del meta suplente del Albacete Héctor Pizana.

La historia del comienzo se repitió en el inicio de la reanudación ya que los locales seguían atacando con los centros al área como argumento más exhibido pero los visitantes volverían a encontrar premio antes.

En el minuto 59 se volvió a adelantar el Gernika merced a un gran tanto de volea conseguido por Larruzea al mandar un balón suelto a la escuadra derecha de la portería de Nadal ejecutado a la altura de la frontal del área tras rebotar en el cuerpo de Adri Gómez, quien bloqueó un disparo previo.

El muro de Altamira

A los mismos problemas del primer asalto, mismos remedios puso el Albacete aunque con más ocasiones de gol ya que Altamira evitó que los goles locales llegaran más pronto de lo que llegaron.

Aira puso toda la carne en el asador para revertir la situación al dar entrada a dos jugadores ofensivos como Iván Sánchez e Isaac Aketxe y retirando del terreno de juego a defensas como Gaffoor y Arroyo.

Héctor Hernández pudo conseguir el empate en el minuto 65 si su remate con el interior de su bota derecha a centro de Acosta desde la derecha no hubiera sido desviado a córner por Altamira y diez minutos después volvería a desperdiciar otra oportunidad con un remate de cabeza potente que obligó a hacer una palomita espectacular.

La sentencia visitante la tendría Iñigo Muñoz en el 69 cuando se plantó solo ante Nadal en un contragolpe pero el jugador del Gernika mandó el balón fuera a la izquierda de la portería local

Tal va el cántaro a la fuente que al final se rompió

La insistencia local obtuvo recompensa primero en el 89 cuando un balón enviado por Josán lo remató de cabeza Aridane para prolongar la jugada y asistir a Hernández, quien empujaría con la suela el balón a la red.

La jugada de este tanto provocó que Altamira tuviera que ser atendido durante varios minutos por los servicios médicos del Gernika y que el colegiado del encuentro alargara el encuentro cinco minutos más.

La locura en el Belmonte se desataría en el último minuto del tiempo añadido cuando Hernández de nuevo anotó para darle la victoria al Albacete con un remate de cabeza cruzado a centro de Iván Sánchez desde la izquierda en el que el esférico golpea en la madera antes de entrar en la portería visitante definitivamente.

Con estos tres puntos, el Albacete llega a los 56 puntos y mantiene las distancias de siete y diez puntos, respectivamente, sobre el Leioa y el Toledo ya que ambos ganaron sus respectivos partidos esta jornada a domicilio ante el Amorebieta (1-3) y Real Madrid Castilla (0-2).

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