Dentro de la Comunidad de Madrid hay una ciudad que quiere ser de plata la próxima temporada. Y esa no es otra que Fuenlabrada. Los pupilos de Calderón están cuajando una segunda vuelta espectacular y ya se han conseguido ubicar en tercera posición, a tan sólo un punto del Leioa. Pero desde el inicio, no todo fue tan fácil para el Fuenlabrada, que comenzó la temporada de mala forma, coqueteando con el descenso. Conforme fueron pasando las jornadas, los amarillos se fueron posicionando en media tabla. Fue en este 2017 donde los madrileños dieron el salto de calidad necesario para poder asaltar los puestos de playoff. Los anfitriones del Fernando Torres se sitúan ahora a siete puntos de la cabeza a falta de siete jornadas, y con su estado de forma, todo es posible.

Dos derrotas en cuatro meses

El punto de inflexión para los fuenlabreños llegó tras su derrota en Gazituaga. Tras ese duro traspiés frente al colista, la temporada fue tornándose primero tranquila y después esperanzadora para los capitalinos. El duodécimo mes concluyó con cinco puntos de nueve posibles para el Fuenlabrada. El cambio de año iba a sentar realmente bien a la entidad del Fernando Torres. Dos victorias locales y dos empates como visitante, uno de ellos rescatando un punto en el difícil Las Gaunas, devolvieron la esperanza a la parroquia kirika. Antes de iniciarse el mes de febrero, el Fuenlabrada era ya séptimo con 34 puntos, pero igualados con el cuarto. La apuesta por el playoff era más que factible.

En febrero, los kirikos continuaron su gran racha como locales, doblegando primero al Mensajero y después a la Real Sociedad B, marcando cinco goles y no recibiendo ninguno. Sin embargo, fuera de casa, el Fuenlabrada recibió dos duros golpes tanto en el Di Stéfano como en el Gal. Dos derrotas que dejaron a los de Calderón algo tocados. Pero ya se iban a encargar los capitalinos de demostrar que podían dar mucho más aún. El calendario parecía muy complicado, Amorebieta en el Torres, visitar Urbieta, recibir al Leioa y visitar el Belmonte. Dioni y compañía iban a demostrar que son capaces de cualquier cosa. Hasta de vencer al líder.

Tras derrotar al Amorebieta en casa por la mínima, al Fuenlabrada le tocaba ir a una cancha complicada, Urbieta. Sufriendo, los de Calderón se llevaron una trabajada victoria, con doblete de Dioni. El siguiente rival para los kirikos iba a ser el Leioa de Gordóbil, toda una revelación de la categoría. San José consiguió anotar un gol en los últimos minutos y meter al Fuenlabrada, por primera vez en mucho tiempo, en puestos de playoff. El calendario, lejos de dar descanso, aún iba a apretar más para los kirikos. El reto era de extrema dificultad: vencer al Albacete en el Belmonte

Y ahí, los capitalinos hicieron sin lugar a dudas su mejor partido de la temporada. Vencieron al mejor equipo de la categoría y además con claridad, endosando a los manchegos un contundente 0-4. Isaac Nana, Cristóbal y Dioni, por dos ocasiones fueron los encargados de poner los goles y demostrar a todo el fútbol de bronce que el Fuenlabrada es un aspirante serio para el ascenso. En los siete partidos que quedan, los de Calderón lo deberán ratificar. Primero, visitando al Rayo Majadahonda y al Socuéllamos , además de recibir en el Torres la visita del Toledo. Y por último haciendo un tour vizcaíno, recibiendo a Zamudio y Barakaldo, y visitando Las Llanas y Lezama. Siete partidos para tratar de cumplir un sueño.

 

El Fuenlabrada, recibiendo al Albacete en su feudo
El Fuenlabrada, recibiendo al Albacete en su feudo (fuente VAVEL.com)