El ariete logroñés Diego Ubis comenzará esta temporada su tercera etapa en la Sociedad Deportiva Amorebieta. El delantero de 28 años es un experto en 2B, ya que ha competido únicamente en la categoría de bronce en los más de diez años que lleva como futbolista senior. Con casi 300 partidos disputados, Eduardo las ha visto de todos los colores, teniendo oportunidades de disputar playoff de ascenso o Copa del Rey, pero teniendo que pasar también el mal trago de una promoción de permanencia. Curiosamente, el riojano jamás ha conseguido un ascenso o sufrido un descenso deportivo. Sin embargo, sí un descenso administrativo, el del histórico CD Logroñés, que acabaría desapareciendo solo unos meses más tarde.
Tuvo que salir de su ciudad
Formado en la Peña Balsamaiso, Ubis comenzó su carrera senior en el CD Logroñés, donde permaneció durante dos campañas. Tras una primera trabajada permanencia, en 2008 llegó el mazazo para el Chuta. A pesar de su salvación deportiva, las deudas sentenciaron de muerte al club y lo mandaron a Tercera. El goleador tuvo que salir de su tierra y poner rumbo al Conquense. En este club consiguió estabilizarse en mitad de la tabla, pero debido a su juventud, no pudo alcanzar una buena cifra de minutos ni destacar demasiado en el apartado ofensivo. A pesar de todo, llegó a disputar la Copa.
A principios de 2010 fue traspasado al Guijuelo. Tras medio año y un playout en el que fue decisivo anotando un gol, cambió de aires hacia Miranda de Ebro. En Anduva, su carrera comenzó a despegar. Ocho veces vio puerta con el conjunto rojillo y logró jugar el playoff. Especialmente desgraciada fue esa promoción para el Mirandés. Cuando Miranda festejaba ya el ascenso, un gol de Ernesto dio la gloria al Guadalajara. Ese verano, Ubis dejó el club castellano y comenzó así su primera etapa en el Amorebieta. Ese curso en Urritxe marcó nueve dianas y logró repetir promoción de ascenso, además de participar en la competición del KO. Los zornotzarras cayeron en primera ronda ante el Linense en su intento de subir.
Vuelta a La Rioja
Tras su buen año, la Unión Deportiva Logroñés reclamó sus servicios, por lo que el riojano volvió a la ciudad que le vio nacer. En la tierra del vino se quedó durante tres campañas, en las que nunca llegó a ser un ídolo para la grada local. Marcó 13 goles con la blanquirroja, pero no emocionó a la ciudad. Ubis fue testigo de la progresión deportiva de la UDL, que culminó clasificándose para playoff en la 14-15. El Logroñés cayó en primera ronda. Seguro que los seguidores riojanos no olvidan el "huracanazo", con discutidísima actuación arbitral. En verano de 2015, finalizó su vinculación con el club logroñés.
Las dos últimas temporadas de Eduardo Ubis discurrieron por Euskadi. Amorebieta (2015-16) y Arenas de Getxo (2016-17) fueron sus dos últimos equipos. Muy destacable fue su campaña en el Amorebieta, donde logró su récord personal de goles, con 15. Al año siguiente en Gobela, sus números no fueron tan buenos. A pesar de todo, contribuyó con 7 goles a la salvación holgada del conjunto de Las Arenas. El delantero centro acumula 58 goles anotados en su carrera y como anécdota, nunca ha sido expulsado.
Un auténtico trotamundos
La segunda incorporación es la del veterano Sebastián Setti, centrocampista argentino de 33 años que se ha recorrido literalmente medio mundo. Este futbolista ha jugado ya en clubes de Argentina, Paraguay, Bélgica, China, Ucrania, Chipre, Grecia, México y España. Por lo que además de futbolista, es un viajero incansable. En términos futbolísticos, Setti actúa de mediocentro posicional y rara vez ha permanecido más de un año en el mismo equipo. Todo lo contrario a un "one men club". Inició su carrera en Argentina, donde pasó por Argentinos II y Almagro. Su siguiente club fue el Guaraní paraguayo.
En 2008 dio el salto al Viejo Continente, de la mano del Royal Amberes belga. Dos años más tarde, probó suerte en el por entonces incipiente fútbol chino, militando en el CC Yatai. Después, volvió a Europa, donde pasó primero por el ucraniano Chornomorest Odessa, luego por el chipriota Apollon Limassol y finalmente por los griegos Apollon, Asteras y Panthrakikos. Tras este periplo por el continente Europeo, volvió a cruzar el charco para recalar en el San Luis de México. Su estancia en el país azteca duró apenas ocho meses. En agosto de 2016, y tras haber recorrido siete países en apenas ocho temporadas, probó por fin el fútbol español, enrolándose en las filas del Llagostera.
Multicultural
Tras solamente cinco meses en La Llagosta, permaneció en el fútbol catalán, fichando por el Figueres. Setti es un aventurero incansable. Con 33 años, puede decir que conoce culturas tan diversas como la mexicana, la paraguaya o la china. Sebastián ha jugado en un total de trece clubes, repartidos a lo largo del planeta. Él es una demostración de la globalización del mundo y del balompié actual. Pocos futbolistas en el mundo habrá que puedan contar tantas anécdotas y vivencias como este jugador.