Retornaba el Logroñés a su feudo y lo hacía con la intención de conseguir una nueva victoria que le acercara a los puestos de promoción. La lucha por la cuarta plaza se está volviendo cara en las últimas jornadas y los riojanos necesitaban los tres puntos para no descolgarse. Rivales directos como Burgos y Real Sociedad B habían logrado vencer sus respectivos choques. Únicamente el Bilbao Athletic perdió en su visita a Irun. Con 33 puntos, los pupilos de Sergio Rodríguez arrancaron el choque a cinco  de la cuarta plaza. A la misma hora, un partidazo entre Mirandés y Racing iba a arrancar en Anduva. Una victoria mirandesista podría dejar la tercera plaza mucho más abierta. La zona alta, al rojo vivo.

Por su parte, los fabriles visitaban La Rioja situados en media tabla, con 29 puntos (y un partido menos), el que no pudieron jugar frente a Osasuna B debido a la nieve. Los de Larrazabal querían romper sus malas sensaciones a domicilio y tomar uno de los campos más complicados de toda la categoría. En Lasesarre, el Barakaldo se mantiene invicto. Fuera, es otra historia. Sin embargo, su última victoria fuera fue hace poco. Los de Eskerraldea vencieron al Lealtad en Villaviciosa, logrando el único triunfo lejos de Lasesarre. Unos 50 aficionados quisieron acompañar a los vizcaínos hasta Las Gaunas. La tarde era inmejorable en la capital riojana. Todo estaba listo para que arrancase el duelo.

Onces iniciales

Sergio Rodríguez decidió apostar por un once competitivo. Iván Aguilar y Germán Sáenz han abandonado el club y Carlos García parece cerca de hacerlo. Fermín Sobrón está lesionado. Debido a esas bajas, Sergio tuvo que completar la convocatoria con chavales del filial. Su apuesta fue prácticamente la habitual: Miguel en portería, lateral izquierdo para Paredes, centrales Caneda y Ramiro y lateral derecho, Miguel Santos. En el centro del campo, Remón y Salvador. Por delante, línea de tres para Rayco, Muneta y Espina. Arriba, Marcos André. En el banquillo, aguardaban Sotillos, Osés, Cifu, Borja Gómez, Arnedo, Ñoño y Dani Gómez.

Por parte del Barakaldo, saltaron al verde los siguientes protagonistas. Txusta en portería, Galán en el lateral derecho, Olaortua, Rubén y Picón como centrales y Son como carrilero izquierdo. Por delante, en el dentro del campo, Baba y el sempiterno Galder Cerrajería. CuervaJurgi por delante y Ander Vitoria en punta. En la banqueta, Andrada, Boian, Álex Pérez, Jaume Pol, Sergio García, Alain y Buenacasa.

Rayco, la diferencia

Alejandro Sánchez Alba decretó el inicio del encuentro. Los locales quisieron demostrar su condición y salieron buscando la meta rival. La primera intentona fue a cargo de Carles Salvador. Rayco, muy activo, generaba pavor en la zaga contraria. Los blanquirrojos, fieles a su estilo, trataban con mimo el cuero sobre el impecable césped de Las Gaunas. A veces, con demasiada paciencia. A los diez minutos, los fabriles hicieron acto de presencia con un disparo de Galán. Al cuarto de hora, ya eran dueños del partido. Cerrajería comenzó a organizar y Babá impuso su físico. El duelo se jugaba ahora cerca del área de Miguel. Son percutía por la derecha, pero sin llegar a crear peligro ni contactar con el estilete, Ander Vitoria.

Cuando peor estaban las cosas para la UDL, un robo en el centro del campo, un gran pase de Espina y el esférico le llegó a Rayco. El canario, en estado de gracia, recortó a sus rivales y cayó en el área. Penalti claro. El juego seguía y Marcos André consiguió embocar, pero el colegiado ya había decretado la pena máxima. Muneta la transformó y cambió el encuentro. Tras ese tanto, el Barakaldo se desdibujó. Paredes y Santos se proyectaban por la banda y Muneta organizaba. Pudieron llegar más tantos. Después de una gran jugada combinativa, Carles Salvador disparó cruzado desde la frontal. A la cepa del poste. El rechazo lo embocó Muneta, en claro fuera de juego. No fue la única. Txusta no acertó en la salida, robó Espina y su disparo desembocó en el lateral de la red.  Con el agua el cuello, seguro que los de Larrazabal agradecieron el intervalo.

Apostó fuerte el Barakaldo y obtuvo recompensa

El técnico gualdinegro arriesgó en el descanso, quitando a Picón por Buenacasa y pasando a defensa de cuatro. Desde la reanudación, fue directo a por el partido. Babá se hizo dueño y señor del centro del campo, aprovechando su gran zancada y corpulencia. La posesión era todo el rato fabril. El Logroñés no lograba salir de su área. Además, cuando lograban respirar, a los atacantes riojanos les fue rana en ataque. Y claro, eso llenó de confianza a los visitantes, que se fueron creciendo con el paso de los minutos. Poco a poco, comenzaron a llevar peligro hacia Miguel. Sergio García entró por Cuerva, y el duelo se inclinó aún más hacia la meta rival.

La primera llegó en un centro que Vitoria no alcanzó a rematar. Seguidamente, Sergio decidió quitar a Rayco por Cifu, buscando más control del juego. No lo logró. El Barakaldo seguía llegando. Una falta desde la medular fue lanzada directamente al palo por Sergio García. Las tablas se veían venir. En un nuevo saque de esquina, la peinó Olaortua en el primer palo y en el segundo, Buenacasa remachó. Gol fantasma, pero el asistente lo tuvo claro. Fue válido y empate a 1. Los nervios llegaron a la parroquia blanquirroja. Un minuto más tarde, un remate a bocajarro de Ander Vitoria fue parado por Miguel.

El Logroñés pagó las prisas y el Barakaldo supo jugar con ellas. Los aurinegros supieron forzar faltas laterales, bajar el ritmo del partido y crear ocasiones. Echaron mano del otro fútbol los de Larrazabal, viendo varias cartulinas (Babá, Jurgi, Cerrajería y Sergio García). Los riojanos pecaron de precipitación. Con más corazón que cabeza, se lanzaron hacia arriba, buscando el tanto salvador. No llegó. La sensación era la de otros días: oportunidad despercidiada. La promoción se queda a cuatro puntos y el siguiente destino es Amorebieta.

Dos grandes ciudades estancadas en el pozo

Para una ciudad de más de 150000 habitantes está siendo durísimo no alcanzar el cuarto puesto. Pero está claro que a la UDL le falta algo, ese saber administrar los partidos, ese salto de calidad para soñar con el ascenso. La entidad presidida por Félix Revuelta buscará la victoria en Urritxe para poder volver a acercarse. El Barakaldo rasca un punto y se queda con 30. La parroquia centenaria no estará muy contenta con el desarrollo de la temporada. Los vizcaínos son siempre el eterno aspirante al ascenso, pero éste nunca acaba de llegar. Y en esta campaña, vagan por media tabla. Invictos en su feudo, no dan el callo lejos de él y por eso están ahí. Siguiente oportunidad: Real Sociedad B en Lasesarre.

Puntuaciones VAVEL

Rayco 3
Babá 2
Buenacasa 1