Guillermo Fernández Romo continúa invicto desde que llegó al banquillo del CE Sabadell con dos victorias y 2 empates sin ceder ningún gol en contra desde que llegó. El técnico destacó la importancia del punto ante un rival que "tiene buena dinámica y buenos jugadores" aunque también destacó que "hemos estado un poco desacertados aunque ellos tenian algo más de inercia en las llegadas"Romo comentó que al equipo le había faltado el poder aprovechar alguna contra con algo más de acierto en el último pase.

El madrileño reconoció que el filial bermellón les había superado defensivamente "sus defensas han estado muy bien y no le ha llegado la pelota bien a nuestros atacantes". También valoró el crecimiento defensivo ya que los arlequinados consiguieron que el filial mallorquinista a penas les generara peligro en los 90 minutos de partido y para Romo ahí está el crecimiento, en que un equipo genere pocas ocasiones aunque volvió a remarcar que si no se complementa con ocasiones de ataque es porque "algo no estamos haciendo bien tratamos de buscar la excelencia en cada partido pero no es fácil y menos en esta categoría" 

En cuanto a la clasificación Romo se mostró precavido diciendo que "estamos puntuando pero eso no quita nada, tenemos que estar preparados para esforzarnos mucho más y que el equipo trabaje mucho más". 

De cara al próximo partido frente a la UE Cornellà, Romo no quiere confiarse pese a la dinámica negativa que arrastra el conjunto verde que ya ha sumado las mismas derrotas que en la primera vuelta entera, pese a ello Romo destaca que "tienen muy buenos jugadores y un entrenador que conoce perfectamente la categoría". El madrileño cree que esta dinámica del Cornellà hará el partido mucho más difícil. "Tienen jugadores que saben jugar y seguro que nos lo van a poner muy complicado".

En cuanto a las bajas de Gai y Paris, el técnico no cree que hayan sido determinantes para la poca ofensividad del equipo, de hecho, ha destacado que con la entrada de Juanjo querían tener más la pelota pero que la dinámica del partido y la energía del Mallorca que llegaba a todos los balones no han hecho posible el juego ofensivo arlequinado.