Para hacer una buena temporada, es primordial sumar en casa. Los partidos como local son esenciales para llevar a buen puerto los objetivos planteados a principio de año y el Badalona parece haber aprendido a las mil maravillas esta lección. Con la victoria del pasado domingo por 1-0 frente al Peralada (equipo que llevaba 6 partidos invicto), se convierte en el cuarto mejor local del Grupo III de Segunda División B. Con 26 puntos de 39 posibles (7 victorias y 5 empates), se coloca justo detrás del Mallorca (34 puntos de 42 posibles), el Vilarreal B (31 puntos de 42 posibles) y el Elche (26 puntos de 39 posibles), los tres conjuntos que ocupan la zona de pódium en la tabla.

Los espectadores del Badalona han podido disfrutar de sumar los 3 puntos frente a equipos de entidad, como los conseguidos contra el Cornellà (4 en la tabla y en zona de Play Off), y de empatar contra el Lleida o el Atlético Saguntino, ambos luchando en la parte alta de la clasificación. De hecho, el único equipo que ha salido triunfante del Estadi Muncipal de Badalona ha sido el Elche, que ganó a mediados de diciembre con tres goles en la segunda parte del choque (1-3). Aún resulta más curioso saber que fue este mismo equipo quien acabó con las ilusiones coperas del Badalona a principios de temporada, cuando acabó superando ronda en los penaltis después de empatar a dos en la segunda parte.

Sin embargo, los partidos fuera de casa impiden que goce de una situación más privilegiada en la clasificación (es undécimo a 7 puntos del Play Off de ascenso). Como visitantes solo han podido conseguir una victoria frente al colista en la penúltima jornada, el Deportivo Aragón, con un gol de penalti en la primera parte (0-1), y han empatado en 5 ocasiones. Números que, de momento, no permiten soñar con alcanzar metas más altas.

El próximo partido de los badaloneses es fuera de casa, contra el  SC Peña Deportiva, donde esperan continuar con la buena racha y sumar 9 puntos de 9 posibles. Después recibirán al Atl. Baleares, con quien esperan seguir contando los partidos de casa con victoria. Dos rivales de la zona baja de la tabla (ambos en descenso) para poder ilusionarse con rozar las posiciones altas de la clasificación.