Un nuevo proyecto ha comenzado en el seno rojillo. Con muy pocas caras conocidas del curso anterior, donde hay que destacar la del killer Antonio Megías y la vuelta a La Roda del talentoso Jordi Pablo, la nave comandada por el técnico valenciano José Carlos Mullor, tendrá el objetivo de volver a salvar la categoría con las menores complicaciones posibles, evitando así las últimas jornadas "de transistores" que ha sufrido la afición rodense en las últimas campañas. 

LA RODA CF 2016/17

Entrenador José Carlos Mullor Estadio Municipal de La Roda
Objetivo Permanencia Posición 15/16 15º
Temporadas en 2ªB 6 Mejor puesto 2ªB
En una frase... Trabajo y confianza para repetir objetivos
LOS PUNTOS FUERTES
Foto: La Tribuna de Albacete

 EL CRACK: Antonio Megías

Foto: fccartagena.laverdad.es

LA BATUTA: Pepe Palau

Foto: granadacf.ideal.es

EL FICHAJE: Israel Jerez

Juego directo con buen juego aéreo y extremos veloces

El once de José Carlos Mullor

Este equipo podrá tener la iniciativa del partido y querer el balón para mimarlo y realizar un buen juego combinativo con gente por el centro con mucha calidad como Pepe Palau, que será el encargado de pedir el balón para iniciar las jugadas de ataque, y como Jordi Pablo, que será el perfecto enganche entre el mediocampo y el delantero. Otra alternativa que tendrá el míster será la de realizar un juego más directo, gracias a un delantero poderoso por arriba y con buen juego de espaldas como es Antonio Megías y a unos extremos veloces como son Sales e Israel Jerez

Pepe Palau tendrá las espaldas perfectamente cubiertas con Samu, un hombre que se desenvuelve de maravilla en tareas de contención y destrucción del juego del equipo contrario. Además, con su 1'87 metros de altura contribuye a que el balón parado sea otra baza de este equipo, junto al buen juego aéreo de Megías y al buen salto de Israel Jerez, que a pesar de su 1'69 m, también hace goles de cabeza.

Por último este equipo contará con dos laterales que pueden aportar mucho en ataque llegando a línea de fondo y permitiendo que los extremos puedan tirar diagonales, aprovechando así la peligrosa profundidad de Israel Jerez.