Era un partido marcado en rojo. El Alcorcón visitaba Anduva con la intención de conseguir esa bocanada de aire necesaria para salir de los puestos de descenso y distanciarse de un rival directo como el Mirandés. Sin embargo, el guion de la película no fue el esperado. Los goles de Urko Vera y Eguaras en la segunda mitad hicieron sucumbir al conjunto alfarero que pierde una oportunidad de plata en la lucha por la permanencia.
Al finalizar el encuentro, el entrenador del Alcorcón, Julio Velázquez, compareció ante los medios para dar sus impresiones. A pesar de los tres puntos perdidos, el cuadro madrileño gozó de buenas oportunidades para adelantarse en el marcador durante la primera mitad, unas acometidas que repelió Roberto, guardameta del Mirandés, de forma milagrosa.
La clave de la derrota es que hemos dejado el partido abierto
Tras el descanso, el Mirandés mostró otra cara haciendo uso de la efectividad que le faltó a los amarillos y que terminó por decantar la balanza finalmente a su favor: "En mi opinión fuimos mucho mejor en la primera mitad. Gozamos de numerosas ocasiones de gol, no lo hicimos, dejamos el partido abierto y ellos, en la segunda mitad, que fueron mejores, lo consiguen en su primer acercamiento. Está claro que en esta competición hay que cuidar los detalles al máximo porque penaliza, como ha pasado hoy".
El Alcorcón, que venía con el impulso de la victoria lograda ante el Mallorca, llegaba con la ilusión de conseguir un buen resultado ante el Mirandés. No obstante, los goles del conjunto local en la segunda mitad echaron por tierra todo ese trabajo. "La clave de la derrota es que hemos dejado el partido abierto. El equipo estuvo sólido y compacto en la primera mitad. Ellos no nos generaron ocasiones, pero con el 1-0 tratamos de volcarnos. Con su segundo gol, el encuentro se convirtió en un correcalles, ellos tratando de que pasaran los minutos para el final del partido y nosotros tratando de acortar distancias", aseguró Velázquez.
La derrota deja tocado a un Alcorcón que la próxima jornada recibirá al Getafe en otro partido trascendental de cara a la salvación. "En esta competición cualquiera puede ganar a cualquiera. Aun así, me quedo con el espíritu e intención de poder luchar hasta el final que ha mostrado el equipo para tratar de meterse en el partido”, concluyó el preparador amarillo.