Tras una primera hora muy correcta el Alcorcón se desmoronó con los goles en propia puerta de David Navarro y Tropi. A partir de ese momento el partido fue muy cómodo para los azulones que se limitaron a desactivar a un Alcorcón falto de ideas y con poco acierto en la última zona de ataque. Jorge Molina mató el partido a cinco minutos del final haciendo estallar de júbilo a la afición que se desplazó a Santo Domingo.

Nueva jornada en Santo Domingo, nueva final para los alfareros. La afición llenaba de ambiente el estadio para ver a su equipo en un partido muy importante que le enfrentaba al vecino. La parroquia azulona también se desplazó en masa hacia Alcorcón y animó ruidosamente a su equipo.

Julio Velázquez, conocedor de la importancia del choque alineó a sus mejores hombres, dando entrada el once a novedades como Cuenca, Bakic o Tropi. Owona no entraba en la lista de convocados y jugadores como Oscar Plano o Víctor Pérez empezarían desde el banquillo. El técnico azulón también introducía cambios con respecto a su once de la jornada anterior colocando de inicio a Chuli o Faurlin.

La importancia del factor suerte

Los primeros compases del choque no tuvieron dueño. Ambos equipos jugaban con imprecisiones en sus pases y no lograban encadenar ninguna llegada con peligro hacia portería rival. Balones largos y controles nada acertados fueron la tónica de los primeros minutos. Poco a poco el Getafe se fue adueñando del balón y de las ocasiones. Primero Pacheco y después Chuli probaron al portero amarillo que supo responder rechazando ambos disparos.

El Alcorcón poco a poco despertaba y llegaba con peligro a la portería de Alberto. Fede Vega por la derecha e Iván Alejo por izquierda avanzaban como auténticos puñales sirviendo centros a David Rodríguez que remataba sin llegar a batir al portero azulón.

Sin embargo el Getafe demostró que la suerte en el futbol es un factor importantísimo y poco antes del descanso en una jugada por banda derecha, Chuli centró el balón y David Navarro introdujo sin querer la pelota en su portería. Minutos más tarde, misma jugada, distintos protagonistas. Damián Suarez puso la pelota en el área y Tropi en semi fallo volvió a marcar en propia puerta para el Getafe.  Los azulones llegaron al descanso con una buena ventaja, excesiva visto lo acontecido en el campo.

El Getafe controló y mató

La segunda parte empezó con un Alcorcón descafeinado. Los dos goles de diferencia pesaban mucho y la reacción del conjunto alfarero no fue la esperada. El equipo lo intentaba pero era muy bien neutralizado por la zaga azulona que no tuvo muchos problemas a la hora de despejar el peligro.

El Alcorcón buscaba el gol por medio del balón parado y a punto estuvo de lograr reducir distancias tras un disparo que se marchó muy cerca de la portería del Getafe obra de Pablo Pérez. Volcados al ataque, los de Julio Velázquez dejaban muchos espacios atrás y Jorge Molina y Portillo más tarde, estuvieron muy cerca de matar el partido al enviar fuera dos ocasiones claras.

Pero la puntilla llegó en el 83 cuando de una jugada aislada, Jorge Molina se sacó un disparo ajustado al que no pudo responder Dmitrovic. Los de Bordalás mataban así un partido cómodo en el que los últimos minutos fueron de dominio amarillo pero sin llegar a tener oportunidades con las que maquillar el marcador.

Situaciones muy dispares

Situación difícil para los alfareros que una vez más dejan escapar los tres puntos de Santo Domingo ante un rival que con pocas ocasiones consiguió tres goles. Toca seguir luchando por un objetivo que se complica cada vez más tras esta segunda derrota consecutiva. Al final de esta jornada los de Julio Velázquez seguirán ocupando el descenso con 36 puntos. La próxima jornada el Alcorcón buscará los tres puntos frente al Reus en una visita dura frente a un buen equipo.

El Getafe recorta distancias frente a sus perseguidores y se mete de lleno en la lucha por estar en lo más alto de la promoción de ascenso. Un gran partido de los de Bordalás que han demostrado ser un equipo sólido y bien organizado. La próxima jornada los azulones recibirán en casa al Nástic de Tarragona en un partido en el que a priori son los favoritos. 

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