El Alcorcón viajaba a Tenerife con la mente puesta en hacer un buen papel ante el equipo blanquiazul. Julio Velázquez, el entrenador del Alcorcón, volvía a confiar en los mismos jugadores que disputaron el encuentro ante el FC Barcelona B la pasada jornada en el Estadio Municipal de Santo Domingo, que acabó con el primer gol en contra de los amarillos de toda la liga en los minutos finales por un tanto de Carles Aleñá.

Fractura del sistema que tan sólido se veía

Julio Velázquez volvía a disponer el mismo sistema que venía trabajando desde pretemporada, una línea de 5 con tres centrales bien alineados que guardaran las coberturas de los laterales que subía como carrileros. El Tenerife por su parte, cambio su sistema habitual y dispuso de un rombo con cuatro centrocampistas, que superaba la línea de medio del Alcorcón, presionándole y robándole la pelota y no dejándole jugar bien.

Ya desde el inicio el Alcorcón no se encontraba cómodo como lo había estado en los anteriores partidos, los centrocampistas alfareros no podían hacer frente a la superioridad numérica y presión del Tenerife, por lo que rápido perdían el balón en mitad de campo y estaban desprotegidos ante el contragolpe con muchos futbolistas que formara de manera muy rápida el cuadro chicharrero.

A los 12 minutos de juego llegaría el primer tanto local. Tras una falta fuera del área, Juan Carlos tiro a puerta en una jugada ensayada, en la que un compañero le abría el hueco de la barrera para que dispusiera de un hueco por dónde meter el balón y así sorprender al guardameta del Alcorcón, Casto.

A pesar del gol, el Alcorcón seguía sin estar cómodo, aunque dispuso de más posesión de balón y de alguna que otra oportunidad, pero sin llegar a materializar. Pero el Tenerife, sin esa ansiedad de hacer gol, esperaba su oportunidad en los contragolpes que tan buen efecto le estaban dando y que tanto peligro le estaban creando al Alcorcón. Así llego el segundo gol del partido a los 38 minut9os, un balón que pilla a la espalda del Alcorcón y que Longo define con mucha clase picando el balón por encima del portero.

Revolución sin éxito en el descanso

Ante el resultado tan adverso, Julio Velázquez intentó hacer cambios. Quitó a David Fernández y a Borja Domínguez y metió a Marco Sangalli y a Albert Dorca. Cambiando el dibujo pasando a una línea de cuatro, con dos centrales solo y con dos laterales, pero Bellvís pasó al extremo izquierdo, Laure lateral izquierdo y Sangalli actuó de carrilero por el lado derecho. Más ofensiva pero igual que inoperante que en la primera mitad.

El equipo aguantó el resultado durante la mayor parte de la segunda mitad, teniendo más balón ante la ventaja que veía por buena el Tenerife, sin necesidad de hacer un segundo gol. Pero fue en el minuto 71 cuando Víctor Casadesús remató a gol un pase de una buena jugada que hizo Juan Carlos en banda y que definió por encima de Casto para hacer el 3-0.

Con el Alcorcón volcado en ataque, y atacando con más corazón que cabeza, llegó el cuarto y definitivo tanto del Tenerife, otro balón a la espalda de la defensa, que estaba cerrando Laure como última esperanza, Malbasic falló en el primer tiro pero le rebotó mientras que Laure tropezaba y Casto estaba batido, hizo a portería vacía el ultimo tanto del partido.

Julio Velázquez afrontará una semana con muchos momentos a analizar y preparar para próximos partidos. El Alcorcón perdió ayer por primera vez en liga, siendo el último equipo en caer derrotado de toda la competición. Además, en el partido ante el Tenerife, le metieron más goles que en todos los cinco partidos de liga anteriores ante equipos como el Sporting, Cádiz, Albacete, Zaragoza y Barcelona B.