Noelia Ramos, portera titular de la Selección Española sub17, se ha alzado con el guante de oro del Campeonato del Mundo sub17 organizado por la FIFA en Jordania. Las grandes actuaciones de la tinerfeña sirven así para sumar otro premio para el combinado español, que se une al bronce del torneo y a la bota de oro lograda por Lorena Navarro.

Con cuatro goles encajados en cinco partidos, un porcentaje de paradas del 73% y tres partidos con la portería a cero, la portera española superó a otras guardametas como la norcoreana Ok Kum Ju o la nipona Momoko Tanaka. La gran actuación de Noelia en cuartos de final frente a Alemania pudo decantar la decisión de la FIFA. Sus paradas valieron para clasificar a España a semifinales y para ser considerada MVP del encuentro.

La 'doble N'

En ese partido frente a las alemanas, la hermana gemela de Noelia, Natalia Ramos, adelantó a España en el marcador. El hecho de que sean gemelas y que compartan la N como letra inicial de sus nombres ha llevado a algunos a bautizarlas como la 'doble N'. Tanto Noelia como su hermana Natalia, que juega de central, se complementaron a la perfección para darle a España una solidez extra en la defensa durante el campeonato. Ambas jugadoras juegan en el Granadilla Tenerife, con el que ya han debutado en Primera División.

Un progreso vertiginoso

Desde que comenzara a jugar con siete años, Noelia no ha parado de crecer en este mundo. Aunque probó un tiempo como delantera, más tarde descubrió que su posición era la portería. Debutó con 16 años en Primera División con el Granadilla Tenerife, equipo revelación de la campaña 2015/16 tras su primer año en la máximo categoría. Este gran primer año del equipo le permitió disputar también la Copa de la Reina.

Con la Selección Española, Noelia ya sabe lo que es saborear los triunfos: fue una de las integrantes de la Selección Española campeona del Europeo de Islandia 2015. Además, tanto ella como su hermana fueron subcampeonas del Europeo de Bielorrusia de 2016. Ahora, Noelia sigue progresando con este galardón. Con 17 años, la 'doble N' tiene un futuro brillante por delante.