La selección española sub-21 salió al Carlos Belmonte de Albacete con la ventaja que le otorgaba el gol de visitante marcado en Austria pero con el saber que tenía que hacer los deberes ante una complicada selección austríaca que mostró mucha ambición y entró a jugar sin miedo los últimos 90’ minutos de la repesca para la Euro sub-21 de Polonia 2017.

Desde el principio los dirigidos por Albert Celades intentaron dominar el esférico pero lo rocosidad de la defensa rival no les permitió imponer su estilo, las continuas faltas de los austríacos les complicaron el trabajo y no consiguieron sentirse cómodos, no hubo fluidez en la creación de España, que contó con una variante, el ingreso de Mikel Merino por Marco Asensio, mientras que en el ataque el “9” fue Borja Mayoral, en detrimento de Iñaki Williams, al igual que Gayá en la zona defensiva por Manquillo.

El más activo en los primeros compases del partido fue Gerard Deulofeu, se movía por todo el frente de ataquen en  búsqueda de asociación con sus compañeros pero el juego estaba embotellado en el centro del campo, ninguna de los dos equipos lograba saltar la línea medular, era una trinchera que parecía imposible traspasar, los intentos de Saúl Ñíguez y de Oliver Torres de conectar con los hombres de ataquen eran repelidos como moscas por los defensores rivales.

Los ataques de La Rojita eran estériles, todos intentaban pero ninguno lograba concretar nada. Saúl y Merino se enchufaron, la zona de creación de España mejoró pero seguían sin generar peligro claro en la meta contraria. No fue sino hasta el minuto 16 cuando Óliver Torres se encontró con una gran centro de Jonny pero su remate terminó en las manos de Bachmann, la sub-21 de España empezó a avisar y Austria entendió el mensaje, no se durmió.

La primera mitad empezó a promediar su intermedio y ninguno de los equipos lograba generar nada, los españoles no conseguían encontrarse entre ellos y los austríacos jugaban como si el empate les daba la clasificación, muy rácano el planteamiento de los rivales de España, eso sí, se defendían con el cuchillo entre los dientes, sin regalar nada. Faltas donde hay que hacerlas, bruscas o no, pero siempre dejaban la pierna bien puesta. Por añadidura, salían sin tarjetas.

En el minuto 30 el árbitro pudo señalar un penalti a favor del equipo de Celades en un centro de Gayá que terminó rebotando en la mano de Mwene, debió ser señalado, pero el colegiado Serdar Gözübüyük decidió dejar pasar la ocasión. “La rojita” terminó la primera mitad con dos remates desde media distancia de Saúl y Denis Suárez, sin peligro para el meta rival y que acusaban la falta de ideas de los españoles. Incluso, la posesión a esa altura era 50%-50% y eso es ventaja para el rival. De esa manera terminaron los primeros 45 minutos reglamentarios.

La segunda parte inició mejor para España, Borja Mayoral creó buena asociación en la zona de ataque con los extremos y eso ayudó a generar peligro, los de Celades salieron con las pilas puestas al complemento. Sin embargo al minuto 57 los austríacos casi se adelantan en el marcador con un potentísimo remate del lateral Sallah que exigió una espectacular volada de Kepa para poder detenerlo. Deulofeu respondió con una gran jugada individual, tiró de calidad y le salió un espectacular eslalon, combinó con Suárez y cuando este le cedió el balón remató pero Bachmann logró retener.

En el córner siguiente Merino estuvo a milímetros de marcar con un testarazo que salió por encima del travesaño, los españoles seguían avisando. Al minuto 70 volvieron a exigir a Bachmann, Mayoral se juntó con Jonny para quedarse sólo ante el portero pero falló al momento de la definición. Después de esta ocasión el fútbol se perdió de Albacete, los dos conjuntos cayeron en un bache y los golpes estaban a la orden del día. Merino se llevó varios, incluso uno de amarilla para Dovedan, que dejó dolorido al navarro.

Al salir de este bache en el juego Deulofeu se inventó otra gran jugada para enfrentarse solo ante el portero Bachmann, pero el guardameta sería la figura de su equipo y el jugador salido de La Masía no logró marcar ante él, culpable máximo de que el marcador refleje un resultado a gafas. Siguió la misma tónica el encuentro y Celades refrescó el conjunto con la entrada de Iñaki Williams por Deulofeu y Llorente por Denis Suárez para poner candado al juego.

Al primer minuto del tiempo agregado Mayoral tuvo otra ante Bachmann, los dos solos, pero hoy no era día para marcarle gol al portero del Stoke City, fue una muralla debajo de los tres palos que hoy España no tuvo la dinamita suficiente para quebrar. Con el mismo resultado con el que inició,total culpa de Bachmann.

“La rojita” cumplió el objetivo de clasificar al Europeo de Polonia, sin embargo tiene una deuda pendiente con la contundencia. Por momentos fue aplastantemente superior al rival pero no logró marcar. Para enmacar la dupla de mediocentros zurdos de Saúl y Merino, una delicia su entendimiento hoy en el césped, mucho futuro tienen estos cracks.

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Sobre el autor
Juan Sebastian Soto Fernandez
Comunicación social. Fútbol como línea de vida y hasta aquí me ha llevado.