Llegaba el Sevilla al Nuevo Los Cármenes con la oportunidad de recortar puntos a Real Madrid y Barcelona pero como bien indicó Jorge Sampaoli en la previa, primero tenían que ganar ellos. La instancia podría parecer sencilla teniendo en cuenta que el rival ocupaba el farolillo rojo de Primera División. Sin Lucas Álcaraz en el banquillo nazarí por tener que cumplir su segundo partido de sanción, Jesús Cañadas, segundo técnico del Granada, sería el encargado de dirigir a los granadinistas.

Jorge Sampaoli no se reservó nada en la jornada 14 y puso a lo mejor que tenía disponible. Con Carriço lesionado, la defensa la formaron Mercado, Rami, Pareja y Mariano, este último como siempre actuaría como carrilero por banda derecha, ofreciendo una alternativa al ataque. Arriba, Sampaoli le daría la alternativa a Correa que llegaba a Granada tras marcar un triplete ante la SD Formentera.

Un Granada concentrado

El partido se inició con el conjunto local muy ordenado. La responsabilidad de tener que ganar para empezar a escalar posiciones en la Liga. El Granada tuvo la primera ocasión a los dos minutos tras una pérdida de balón de Pareja en la salida desde atrás. Los nazaríes no se amilanaron a pesar de recibir a uno de los conjuntos más en forma de toda la categoría.

El Sevilla deja de especular

Tras el susto inicial, el Sevilla tomó el control del esférico y empezó a generar ocasiones por banda derecha con Vitolo y por izquierda con Mariano. Esos acercamientos no se transformaron en disparos a puerta pero si dieron la sensación de que en cualquier momento los hispalenses podían colocarse por delante en el marcador. Poco le duró ese dominio de la posesión a los hombres de Sampaoli que a partir del minuto 20 vieron como el Granada se reponía a base de una defensa ordenada y que no se desarbolaba ante las embestidas nervionenses.

Pereira abre la lata

En una jugada de ataque del Sevilla, los hispalenses perdieron el balón en la zona de tres cuartos y el esférico acababa en los pies de Boga que avanzaba muchos metros para plantarse en el área, tener paciencia y hacerle un nudo a Adil Rami que le dio demasiado espacio. Boga levantó la cabeza y se la dio por bajo al punto de penalti a Pereira, este superó con un disparo raso a Sergio Rico y ponía el 1-0 en el minuto 27.

Carrusel de ocasiones nervionenses

Tras el gol en contra, el tercer clasificado de Primera División se dispuso a igualar el partido cuanto antes. Al contrario que en los primeros instantes, esta vez sí que terminaron en disparos a puerta que detuvieron entre el cancerbero Ochoa y el defensa Gabriel Silva. Este último sacó bajo palos la ocasión más clara para los rojiblancos que este sábado vestían de amarillo albero. Con este resultado adverso para los nervionenses se llegó al descanso.

Falta de puntería

En la reanudación el Sevilla intentó con más corazón que cabeza buscar el empate pero los acercamientos terminaban en un alto porcentaje con un fallo en el último pase o desacierto a la hora de chutar entre los tres palos. El Granada por su parte no sufría demasiado y aguantaba ordenado atrás para lanzar un contragolpe cuando la ocasión lo hiciera posible.

La puntilla nazarí

Con el paso de los minutos el Granada se iba encontrando más cómodo ante un Sevilla que en la matinal del sábado no se había terminado de encontrar nunca cómodo. Nada le salía bien a los hispalenses y el Granada dio un paso al frente. En un córner botado por los nazarís, un jugador local prolongaba y en el segundo palo, Lombán remachaba a gol poniendo el 2-0 en el minuto 57.

Contra todo pronóstico el Sevilla caía con claridad y merecimiento ante el colista de Primera que este sábado demostró que con esa actitud irá sumando puntos de tres en tres más pronto que tarde. Los hispalenses por su parte continuaban tras el 2-0 buscando un gol que los enganchara al encuentro.

Ochoa desquicia al Sevilla

Uno de los mejores jugadores del partido fue sin duda junto al delantero Boga, el cancerbero mejicano Ochoa. El jugador nazarí paró todas las ocasiones de las que dispuso el Sevilla y desquició por momentos a Vietto, Vitolo y Franco Vázquez entre otros. La única forma que tuvieron los rojiblancos de superar a Ochoa fue desde los once metros en un penalti que se señaló en el tiempo añadido y que transformó Ben Yedder. Un gol que llegó demasiado tarde y que tras él, González González señaló el final del choque.

Con este resultado el Granada sube una posición en la tabla clasificatoria momentáneamente con ocho puntos gracias a su primer triunfo en lo que va de Liga. El Sevilla por su parte se queda en la tercera plaza y tendrá que esperar a lo que pasa en el clásico entre Barcelona y Madrid para saber a cuanto se queda de los dos primeros puestos. Derrota nervionense (tercera en lo que va de curso) que no es la mejor forma de viajar el miércoles a Lyon para jugarse el pase a octavos de la Liga de Campeones.