Samir Nasri comenzó su carrera a los 9 años en el Olympique de Marsella y durante años estuvo en su cantera. Su debut profesional se produjo en la temporada 2004-2005 contra el Sochaux. En la temporada siguiente se convirtió en jugador importante en el club, pues disputó un total de 30 partidos.

En la temporada 2008-2009 cambió los aires franceses por ingleses y fichó por el Arsenal, donde estuvo 3 temporadas; en cada una de las 2 primeras temporadas no llegó a disputar más 20 partidos, pero el francés se afianzó en el once titular en su siguiente temporada ya que jugó 30 partidos.

En agosto de 2011 se unió al Manchester City, con el cual firmó 4 temporadas. En su primera temporada obtuvo su primer título importante como jugador, pues ganó la Premier League. Con el paso de los años Nasri fue perdiendo protagonismo y en la actual temporada el francés quiso salir cedido del club a pesar de la insistencia de Pep Guardiola para que se quedara.

Samir Nasri afrontaba una nueva temporada con mucha ilusión y no decpcionó en sus primeros partidos, cogiendo las riendas del equipo sevillano y jugando al ritmo que él quisiera. Su habilidad técnica, su creatividad, ritmo y habilidad para leer el juego no pasaron desapercibidos para la afición y se ganó al Sánchez Pizjuán.

El debut con el equipo sevillano se produjo en el primer encuentro liguero contra Las Palmas donde jugó los 90 minutos, sin embargo, se lesionó y se perdió el partido transcendental contra la Juventus en Champions League. El francés reapareció en el derbi sevillano y a partir de ahí disputó 7 partidos y solo fue cambiado en dos ocasiones. Desgraciadamente se lesionó otra vez contra el Sporting de Gijón y se perdió el partido contra el Dinamo de Zagreb. Reapareció contra el FC Barcelona, pero volvió a recaer de su lesión y estuvo un total de 5 partidos ausente. En la pasada jornada de Champions League volvió a jugar contra el Lyon 86 minutos. Nasri ha alternado lesiones con partidos completos en el equipo andaluz y se nota que es importante para Sampaoli.