Podría ser el título de una película de miedo, pero no, es la pura (y puede que triste) realidad; "Inversores externos sobrevuelan Nervión".

La etapa gloriosa que ha vivido el Sevilla en la última década y la expansión que ha sufrido el club como marca y deportivamente, ha llamado la atención de varios grupos inversores y empresas, que ven en el Sevilla una posible vía de negocio y una oportunidad de ligar su expansión a la del conjunto andaluz. Este crecimiento sevillista va de la mano de unos espectaculares números y resultados deportivos, pero igual de espectacular es la oferta que el presidente del Sevilla dice tener sobre la mesa para hacerse con un importante paquete accionarial del conjunto sevillista.

Según adelanta el portal web El Confidencial, el grupo inversor es de origen asiático, y este estaría dispuesto a pagar hasta 1500€ por cada acción. Esto es muy llamativo teniendo en cuenta que no hace muchos años, si tenías alrededor de 60€, podías adquirir una acción del conjunto sevillista.

Algo bueno para el equipo de Nervión es que el paquete accionarial del club está muy repartido y diversificado, por lo que es difícil que el grupo inversor llegase a controlar de forma total la gestión del club. Aproximadamente un 40% del total del paquete accionarial nervionense está en manos de pequeños accionistas, porcentaje muy alto teniendo en cuenta el posible peligro de estos grupos inversores. Otro 27% está en el seno de la familia Del Nido. La plataforma “Sevillistas por Nervión”, de la cual José Castro es la cabeza visible, controla un 15%. Rafael Carrión, expresidente sevillista, posee otro 15%. El total de las acciones del club es 103.467, con un capital social de 6.208.020€. Esta mareante oferta por las acciones hace que algunos estén pensando en venderlas, algo que no vería con muy buenos ojos la mayoría de la afición sevillista.

El recelo que existe en Nervión a la llegada de inversores externos al Sevilla FC es lógico y comprensible. No hay que ir muy lejos para ver casos claros donde el dinero no llevó al club a crecer, sino todo lo contrario. El Valencia es el ejemplo más claro de este tipo de inversiones, donde un grupo externo llega con dinero, compra un gran paquete accionarial, y se consigue hacer con el control del club. En este caso, el señor Peter Lim ha llevado al Valencia a una situación peor de la que estaba, en la que a base de fichajes extraños y cuanto menos discutibles, ha conseguido que la totalidad, o casi la mayoría de la afición ché esté situada en su contra. Otros ejemplos de grupos inversores son Málaga, Manchester City, Paris Saint Germain o recientemente, el Espanyol.