La cantera sevillista, siempre fructífera, continúa de celebración. Una fiesta que no para sobre todo desde que el primer filial, el Sevilla Atlético, lograra un histórico ascenso al fútbol profesional tras una temporada de ensueño en el grupo IV de Segunda División B, con un colofón de película en la tanda de penaltis frente al Lleida Esportiu.

Uno de los héroes de aquel día, José Antonio Caro, continúa de forma imparable su progresión, ahora en LaLiga 1|2|3, y se ha convertido en un portero de presente para el filial de Nervión y, posiblemente, en opción de futuro para el primer equipo. La dirección deportiva lo sabe de sobra y por ello ha decidido renovar el contrato del cancerbero onubense, que ahora se prolongará hasta junio de 2019.

José Antonio Caro Díaz (03/05/1994, La Palma del Condado), tras pasar por las distintas secciones inferiores del club, dio el salto al equipo "B" en la temporada 2014/15 para pelear el puesto bajo palos a David Soria. El palmerino debutó en la jornada cuarta de Liga en un encuentro en la ciudad deportiva frente a El Palo, con victoria local y manteniendo Caro la meta imbatida. Pero aparte solo pudo participar en tres encuentros más en aquella temporada, ya que el madrileño fue la opción preferida por los técnicos para defender la portería.

Su gran actuación en la tanda de penaltis ante el Lleida valió un ascenso

Caro siempre será recordado como "el héroe de Lleida"

Pero todo cambió el curso siguiente, cuando Soria, a pesar de empezar igualmente como titular, debía ascender a la primer plantilla para cubrir la baja de Beto por lesión. De esa forma, el arco franjirrojo quedaba vacante y Diego Martínez apostó por el onubense, una apuesta que desde luego no defraudó. Porque desde que entrase por primera vez en el titular, jamás volvió a salir, salvo en la última jornada de Liga en la que el entrenador le daba descanso. El guardameta realizó una contribución sobresaliente durante toda la fase regular, y en el playoff no sería diferente ni mucho menos. Y las pocas dudas que quedaban de él, se encargó de despejarlas en la mencionada tanda de penaltis frente al Lleida, en la que Caro detuvo un penalti cuando más sufría su equipo y transformaba la pena máxima decisiva, la que daba el ascenso a Segunda.

Ya en la categoría de plata, el Sevilla Atlético no ha dejado de "dar guerra", empezando desde su portería, donde sigue intratable el palmerino, protagonista de algunas de las mejores paradas vistas en el presente ejercicio e inamovible en el once del filial siempre que el primer equipo no reclama de su presencia para alguna convocatoria. En definitiva, un guardameta de presente y de futuro que el Sevilla FC ha decidido no dejar escapar, para prolongar la ilusionante lista de metas de la casa de estos últimos años, con hombres como Sergio Rico o el propio David Soria a la cabeza.