Numerosas opciones se han barajado en estos últimos día pero finalmente será el Wanda Metropolitano el que acoja la gran cita del fútbol español.  Entre las opciones estaban el Sánchez-Pizjúan ya que Pepe Castro en unas declaraciones dijo que iba a pedir el feudo sevillista debido a que en el 2015 el Barça  disputó la final en su propio estadio aunque está opción no se contemplaba porque el conjunto catalán no estaba por la labor.

Otras de las sedes que ha sonado es el Santiago Bernabéu, como cada año, pero el Real Madrid no se ofreció a prestar el estadio para la final ya que su máximo rival la disputa añadido a los pitos que seguramente haya al himno por parte de la afición del Barça.

También se habló del estadio de la  Cartuja pero entre que había que prepararlo para la final y la gran distancia que hay para los aficionados del Barcelona no ha tenido mucha fuerza está opción.

Mestalla es otro de los clásico para acoger la gran final, esta sede ha perdido fuerza ya que la gran afluencia de público que se espera para la cita han optado por no coger está opción sumando también la ubicación que perjudica a la afición sevillista.

Todas estas sedes que se han rumoreado ,aparte de la del Wanda, era porque el Atlético de Madrid disputa su partido de liga frente al Betis en el mismo fin de semana que se celebrará la final, de ahí que hayan salido estos nombres aunque es cierto que desde principio de temporada se hablaba que este estadio iba a ser la final de Copa del Rey. El conjunto madrileño lleva tres años seguidos organizando este evento , precisamente el Sevilla ya disputó hace dos años una final contra el Barça donde perdió por 2-0  en el mítico Vicente Calderón en el que fue el último partido de Emery como entrenador hispalense.

El día exacto del partido será el sábado 21 de abril en un horario aún sin confirmar.