Como no puede ser de otra forma, esta semana las miradas están centradas en el jugador ovetense Jorge Meré. Y es que el joven central escribió el pasado sábado, en las páginas de oro del conjunto rojiblanco, con una actuación digna de un veterano. Con tan solo 17 años, y sin dudar en ningún momento de sus acciones, despachó un gran partido mostrando las cartas de lo que puede llegar a ser en un futuro.

Si bien es cierto, comenzó su andadura en el Real Oviedo, pero dadas a sus fantásticas cualidades, no tardaron mucho en echarle el ojo desde Mareo. Pescaron en la cantera azul un diamante sin pulir pero con altas expectativas. Finalmente se incorpora a los rojiblancos en categoría cadete. Con aun toda la formación por recibir se convierte poco a poco en un hombre referente en todos los equipos en los que formó parte. “Posible capitán” era una de las palabras más escuchadas durante estos días de parte de la afición rojiblanca, viendo en él un hombre curtido en Mareo y con galones de líder.

Un chico récord

Hasta el partido de Zaragoza, el futbolista que había debutado con edad más temprana en el primer equipo en partido liguero había sido Eloy Olaya, un record que le arrebató Meré como preámbulo de su actuación. Apunto de cumplir la mayoría de edad está quemando a una velocidad vertiginosa las etapas marcadas y parece que no será su último récord como futbolista. Prueba de ello es otro de sus logros recientes, como el debut con la selección española sub-21 en un partido ante Bielorrusia. Con los pies en la tierra y bastante humildad ha conseguido adelantar a sus compañeros en la disputa por ser el tercer central en el primer equipo disputando así sus primeros minutos con el primer equipo en La Romareda.

De la mano del Pitu llegó su explosión ya en el conjunto filial. En el verano del 2013 fue llamado para realizar la pretemporada con el equipo por aquel entonces dirigido por Abelardo. El míster vio unos mimbres importantes y quiso tomar las riendas de la situación dándole una oportunidad que no desaprovecharía. Con tan solo 16 años -aun siendo juvenil- se hizo un hueco en la defensa rojiblanca, donde ya lleva disputados más de cuarenta partidos en la categoría de bronce, siendo un fijo domingo tras domingo.

Como si se tratase de su padre, Abelardo sigue muy de cerca a la perla de Mareo, aconsejando en todo momento al joven desde su veteranía en ese puesto. Y es qué Meré no oculta su agradecimiento al míster considerándolo un referente personal.

Humildad como carta de presentación

Si algo tiene claro Meré es que estas oportunidades hay que aprovecharlas pero siendo realista. Y es que pese a su buena actuación en Zaragoza, admite que su sitió natural es en la defensa filial. La campaña realizada por Bernardo y Luis Hernández al frente del primer equipo deja bastante cerradas las puertas al resto de compañeros de demarcación. Lo que si parece seguro, es que si alguno de ellos causa baja -como el colombiano el sábado- Meré ha puesto las cartas sobre la mesa para ser el sustituto puntual. La cercanía de la quinta amonestación para el central madrileño, puede dar una nueva oportunidad a Jorge Meré siendo un recambio de garantías.

Muy agradecido a Luis estuvo el otro día. Y es qué el central madrileño pesé su “inexperiencia” en esta demarcación -recordemos que es su primera temporada jugando ahí- ejerció de líder del equipo y haciendo más fácil el debut del canterano. Entre ambos consiguieron que los aficionados rojiblancos no echasen de menos a Bernardo durante esos minutos. Reto de gran dificultad pero que lograron con matricula.

El mismo domingo, sin tiempo a pararse a asimilar lo ocurrido el día anterior, acudió a ver el partido que sus compañeros del filial disputaron en Mareo frente al Murcia, teniendo claro que su mente está en ayudar al equipo a mantener la categoría en estos partidos que restan para el final de campeonato. Con la mente en Astorga, y la intención de sacar los tres puntos ante un rival directo es donde se encuentra el joven en estos momentos.

Un futuro prometedor

Si bien es cierto, Meré se caracteriza por su sencillez, y no pensar más allá del partido siguiente aun no se ha dicho nada de su futuro al respecto. Ante está explosión muchos son los ojos que se han dirigido hacía el futbolista, despertando el interés de propios y extraños. Con un contrato que le vincula aun tres años más al conjunto asturiano -ya con ficha del primer equipo- el cuadro rojiblanco intentará atar a su perla lo antes posible ante las posibles ofertas que puedan llegar.

Las intenciones del Sporting, tanto aficionados como dirigentes, es que el central ovetense continúe en la disciplina rojiblanca el mayor numero de años posibles. Y es que se ve como un posible estandarte de está nueva etapa en la que Mareo ha vuelto a ser el pilar fundamental del primer equipo.