Segunda derrota consecutiva para el Sporting de Gijón, que no encontró la potencia necesaria para arrebatarle los tres puntos al Celta de Vigo, un equipo que parece remontar el vuelo después del desastroso comienzo de Liga. Tras caer vencido ante el Leganés, Real Madrid y Atlético; y empatar a cero contra el Osasuna, esta primera victoria ha servido a los vigueses para colocarse decimosextos en la clasificación, puesto cercano al descenso, pero que les deja respirar al menos una jornada más. 

Por su parte, el Sporting de Gijón parece haberse estancado desde que saboreó la derrota en el Vicente Calderón, estadio maldito para los asturianos, que llevan diez años sin ganar a los colchoneros. Ahora, décimos en la tabla, el conjunto que dirige Abelardo no quiere acomodarse en mitad de la clasificación, y busca por todos los medios volver a la zona alta junto a equipos como el Sevilla. 

En rueda de prensa, el entrenador sportinguista no ha querido entrar en detalles, sobre todo con el tema de los penaltis: "Desde el banquillo no se ve, allí soy miope", ha zanjado.

Acerca del partido, Abelardo ha hecho hincapié en el esfuerzo de los suyos: "Habíamos hecho lo más difícil, lo del penalti ha sido una lástima después de tanto trabajo defensivo. Nosotros ni tiramos apenas a portería, pero el Celta tampoco". Además, al técnico le han preguntado por el próximo encuentro, que disputarán contra el Barcelona en El Molinón el próximo 24 de septiembre, pero ha preferido omitir detalles: "No pienso ahora para nada en el Barcelona, ya llegará el partido. De momento, nuestro objetivo es mantenernos, y aunque sé que será difícil, iremos poco a poco". 

Por último, ha evitado entrar en individualidades que perjudiquen la confianza del grupo: "Estoy contento con el trabajo de los que entraron", ha concluido.