El Sporting de Gijón ha hecho esta semana borrón y cuenta nueva para continuar ejercitándose al mayor nivel posible. Los asturianos cayeron la pasada jornada en El Molinón por 1-2 contra el Valencia, rival que después de un pésimo comienzo liguero, ha conseguido escalar puestos en la clasificación gracias a los fallos del conjunto rojiblanco. El equipo, a las órdenes de Abelardo, ha contado con un único día de descanso y ha realizado numerosos juegos con el balón, de cara al partido de este sábado contra el Granada C.F. 

Ambos equipos se encuentran en situaciones similares. El Sporting comenzó ganando en septiembre, lo cual supuso toda una inyección de positividad para la plantilla al completo. Sin embargo, los continuos cambios de Abelardo en cuanto a las posiciones de sus jugadores, y errores imperdonables tanto en defensa como en la delantera, han hecho que los asturianos pasasen de un reconocido segundo puesto, a la zona de descenso, con tan sólo siete puntos. Por su parte, el Granada es último en la clasificación con dos puntos gracias a empates, ya que el resto de partidos han sido derrotados sin tener la oportunidad de conocer el sabor de la victoria en esta temporada. 

Romper la mala racha como objetivo

Cinco partidos consecutivos cayendo derrotados son más que suficientes para entender que algo va mal en el Sporting de Gijón. En las últimas semanas, han sido numerosas las acusaciones por parte de la afición hacia Abelardo Fernández -técnico del equipo- que ha preferido obviar las preguntas referidas a ese tema. Más bien al contrario, el entrenador ha continuado trabajando con la firmeza de que su equipo dejase de encerrarse en defensa y saliera a pelear, cubriendo esas zonas del centro del campo y la delantera que estaban siendo todo un problema para los asturianos, sin embargo, en el último partido que disputaron contra el Valencia, el equipo volvió a mostrarse excesivamente encerrado y con pocas opciones de atacar al rival, situación que preocupa gravemente al cuerpo técnico. 

Esta semana, el equipo ha descansado tan sólo un día de la semana para continuar los demás con numerosos ejercicios en el que el protagonista ha sido el balón, y dando algunas sesiones especiales a los jugadores que normalmente son titulares, de forma que se pudieran recuperar lo antes posible del cansancio acusado en los últimos encuentros. Además, Abelardo ha tenido una nueva tarea esta semana. A la baja de Babin por rotura fibrilar, se sumó el domingo la de Amorebieta, sancionado tras acumular tres tarjetas amarillas. Esto ha supuesto una reestructuración en cuanto a la defensa, que posiblemente esté ocupada este sábado en Los Cármenes por Nacho Cases y Sergio Álvarez en el centro del campo. 

Con respecto al once inicial, no se advierten nuevos cambios para afrontar el partido ante el Granada. Cuéllar en portería; Lora, Lillo, Meré e Isma en defensa; Cases y Álvarez en el centro del campo; Víctor Rodríguez junto a Moi Gómez; y tanto Cop como Carlos Castro en la delantera. 

En la rueda de prensa previa al viaje hacia Granada, Abelardo ha considerado que el Granada es un rival directo, y sobre todo, "muy importante para cambiar la dinámica", tal y como él mismo ha admitido. "A pesar de que el Granada es un equipo que todavía no ha ganado ha hecho una plantilla nueva, ha invertido en nuevos jugadores pero que es evidente que ha empezado mal", ha señalado Abelardo, que prevé un partido "difícil para los dos y con mucha tensión, pero en el que hay que tratar de lograr los tres puntos".

Con respecto a las numerosas preguntas que cuestionan el nivel de sus propios jugadores, el asturiano ha sido contundente: "El juego del equipo no está siendo el que quisiera", y ha finalizado diciendo que "debemos tratar que los errores que se comentan no perjudiquen tanto, hay que mejorar en todos los aspectos".

Una nueva final para el Granada, en casa

El equipo asturiano no es el único que atraviesa una situación difícil. Últimos en la clasificación y con tan sólo dos puntos, se encuentra el Granada, que no consigue levantar cabeza en las últimas jornadas. El conjunto nazarí ha sido protagonista de seis derrotas en ocho partidos, estos dos de diferencia, empatados. 

Para la plantilla de Paco Alcaraz, que aún no conoce la victoria en esta temporada de Liga, el partido contra el Sporting de Gijón es una final por el punto de inflexión que podrían suponer los tres puntos, toda una dosis de positividad que empujaría a la plantilla a seguir luchando por la salvación, posible en estos momentos. Conocedores de la mala racha del Sporting, se han entrenado incluso en sesiones dobles esta semana, ya que su próximo rival es el F.C Barcelona, y son conscientes de la dificultad con la que cuentan. 

Con respecto al once inicial, los granadinos siguen sin poder contar en sus filas con Foulquier, Gastón Silva e Ivan Kelava, bajas por lesión; aunque afortunadamente recuperan a Krhin, Carcela-González y Tabanou, sin embargo sólo los dos primeros apuntan a la titularidad. Por lo demás, estará Ochoa en portería; una defensa formada por Tito, Vezo, Lombán y Silva; en el centro del campo Samper y Angban; Carcela-González y Pereira adelantados y tanto Barral como Ponce en la delantera. 

En rueda de prensa, el técnico del equipo ha afirmado que en caso de ganar, sería "una victoria más que merecida". Paco Alcaraz, ha hecho hincapié en que "tenemos que pensar que jugamos en casa y tenemos posibilidades", y ha continuado asegurando que "es un partido especial por muchos motivos, porque inicio una tercera fase en casa, porque la gente merece irse alegre del campo y porque estamos dispuestos a dar el máximo". 

Junto a su afición y jugando en casa, el Granada lo tiene todo a favor para conseguir quedarse con los tres puntos. Tres puntos que podrían saber a oxígeno, a energía y al final de una etapa oscura que el club prefiere olvidar. 

Posibles onces iniciales