Ya no queda nada para el decisivo partido que va a enfrentar el Sporting con el Granada en El Molinón. Una final para dos equipos que no están haciendo una buena temporada y que se encuentran en zona de descenso, el Granada decimoctavo con 19 puntos, y el Sporting decimonoveno con 18. Teniendo la permanencia a seis y a siete puntos respectivamente, este partido será clave para el futuro de estos dos equipos en lo que queda de liga.

El Sporting es el equipo al que más penaltis en contra le han pitado hasta ahora en esta temporada, dato muy útil para ilustrar los problemas defensivos que está teniendo este año la zaga rojiblanca. El árbitro que el Comité Técnico de Árbitros ha designado para este partido es el catalán Xavier Estrada Fernández. El colegiado ya lleva ocho años arbitrando en Primera División e incluso se convirtió en árbitro internacional en 2013, pero los aficionados sportinguistas no tienen muy buenos recuerdos de él.

Y es que en el partido de la temporada pasada que ganó el Granada en Los Cármenes por 2 a 0, Estrada Fernández fue protagonista al anular un gol válido a los asturianos, pitar un penalti inexistente para los andaluces y para acabar, expulsó a Sergio Álvarez, y al entonces entrenador del Sporting Abelardo, todo esto entre risas de algunos jugadores granadinos. Esto hizo enfurecer al técnico asturiano que incluso aseguró que tenía a sus jugadores llorando en el vestuario. Finalmente los dos equipos lograron permanecer un año más en primera.

El destino es caprichoso y ha hecho que se repita la situación del año pasado, pero con los dos equipos un poco más hundidos en la clasificación. Lo que esperan tanto los andaluces como los asturianos es que los protagonistas sean los jugadores y el fútbol para así poder olvidarse del árbitro.