Sporting de Gijón y RCD Espanyol abrirán este martes en El Molinón, desde las siete y media de la tarde, la trigésimo cuarta jornada de La Liga Santander. Los asturianos ven este encuentro como una oportunidad de oro para sumar tres puntos vitales y, de una vez por todas, recortar la diferencia de cuatro puntos con la que aún cuenta el Leganés, equipo que marca la salvación, y así trasladar toda la presión al cuadro pepinero, que se medirá el miércoles a la Unión Deportiva Las Palmas en Butarque. Ganar o ganar, no hay otra opción. Por su parte, los pericos tratarán de cosechar una nueva victoria que les permita meterse de lleno en la lucha por los puestos europeos.
A día de hoy, el conjunto catalán ostenta la novena posición de la tabla clasificatoria con 49 puntos tras 33 partidos disputados. A pesar de que los pupilos de Quique Sánchez Flores empezaron la campaña de manera muy irregular y con grandes dificultades en la parcela defensiva, el técnico madrileño ha sabido conformar un bloque sólido, capaz de rentabilizar al máximo sus aproximaciones al área rival y no conceder apenas ocasiones de gol. Esta gran virtud quedó patente en su visita a Butarque el pasado 16 de abril, hace poco más de una semana. Aunque el Lega dominó la mayor parte del encuentro, el Espanyol supo sufrir y, finalmente, se acabó llevando la victoria con un gol de Léo Baptistao en los últimos segundos. Tal como ha afirmado el entrenador en rueda de prensa previa al partido, el plan ante el Sporting será muy similar.
La mayor amenaza para la esperanza rojiblanca será, sin duda, Gerard Moreno. El de Santa Perpètua de Mogoda es el máximo artillero perico, con 11 dianas y cuatro asistencias en su haber. Rodeado de futbolistas de enorme calidad en todas y cada una de las líneas, el delantero barcelonés está cuajando su mejor temporada como futbolista profesional y, en cada partido, demuestra ser un auténtico dolor de muelas para la defensa rival.