Se avecinan aires nuevos en la parcela deportiva del Sporting de Gijón. El consejo directivo del conjunto gijonés ha previsto cambios severos en la conformación de la próxima temporada en la división de plata. Con la marcha del director deportivo, Nico Rodríguez, aún sin oficialización por parte del club, se estiman diversas modificaciones en la plantilla. Entre ellos, se baraja la sustitución del actual entrenador del equipo, Joan Francesc Ferrer "Rubí". La falta de acierto para dar con la tecla que hubiera permitido lograr la permanencia ha hecho mella, y se valora una posible desvinculación del técnico catalán. Sin embargo, esta es una decisión que tendrá que tomar el nuevo director deportivo, quien podría ser nombrado a lo largo de esta semana. A pesar de ello, los jugadores han querido mostrar su opinión y rechazan la probable marcha del preparador y de su equipo técnico, a los que apoyan rotundamente.

A pesar del descenso, Rubí ha mostrado cualidades muy valoradas por la actual plantilla. Tras la marcha de Abelardo, el técnico se ha dejado querer por los jugadores y desean una continuación en la que sea el encargado de encabezar el proyecto de vuelta a la élite. Con el ya conocimiento de la plantilla y de los valores del club asturiano, Rubí puede jugar una aparente ventaja respecto a su posible sustituto, algo que los jugadores saben y quieren hacérselo saber a los miembros de la directiva. Sin embargo, esta seguirá siendo una decisión destinada para el nuevo director deportivo, quien tendrá que conformar una nueva plantilla, tras la ya sucedida y próxima despedida de jugadores de la actual temporada.

La falta de ideas y el exhaustivo trabajado realizado por Abelardo durante las dos últimas temporadas fueron las razones por las que se produjo la entrada de Rubí en la entidad. A pesar de su plena disposición por lograr el objetivo de la salvación, la falta de fortuna parece ser una de las premisas por las que se valora ahora su posible desvinculación. El escaso acierto a la hora de cosechar los puntos que hubieran permitido lograr la permanencia es una realidad en el club, a pesar de la clara mejoría en el juego que supuso su llegada.