Tras una temporada para olvidar, en la que el Sporting de Gijón descendió a Segunda División por méritos propios, los asturianos aspiran a regresar a la élite por la vía rápida, como ya hiciera el Getafe la pasada campaña. Para lograr el objetivo, Miguel Torrecilla, nuevo director deportivo rojiblanco, ha ideado un proyecto totalmente nuevo, con un técnico experimentado como Paco Herrera a los mandos. La travesía será larga y dura, pero todo el mundo en Gijón aspira a celebrar la vuelta a Primera División al término del curso.

Un pasado de gloria…

La temporada que está a punto de comenzar será la cuadragésimo séptima del Sporting en la categoría de plata del fútbol español, en un total de ocho etapas distintas a lo largo de su centenaria historia.

Tal como reflejan las cifras, el cuadro gijonés ha permanecido más tiempo anclado en Segunda División del que realmente desearía su hinchada, sobre todo en los últimos 25 años, y es que desde la llegada de la familia Fernández el club no ha hecho honor a su glorioso pasado, pasando de lucir la rojiblanca por toda Europa a la más absoluta mediocridad, tanto en Primera como en Segunda.

Sin lugar a duda, el Sporting es uno de los favoritos para el ascenso, junto a Osasuna y Granada. Tanto por historia como por plantilla y presupuesto, los rojiblancos han de ponerse como meta (casi como obligación) el regreso a la élite. Sin embargo, ¿les pasará factura la responsabilidad de ser favorito o por el contrario demostrarán sobre el césped el peso del escudo que portan sobre el pecho?

… y un presente incierto

Muchos sportinguistas no desearán recordar las peripecias de su equipo en la pasada campaña, pero es necesario si se pretende comprender la realidad que vive hoy día el club: hastío, inestabilidad institucional y descontento generalizado.

Una temporada "de chiste", un auténtico despropósito. Así de sencillo se podría resumir la campaña del Sporting previa a su regreso a Segunda División. Si no eres capaz de sumar los puntos necesarios para permanecer en Primera en uno de los cursos donde la salvación ha estado más "barata", es que te has ganado a pulso el descenso de categoría.

El cuadro asturiano lo tenía todo de su mano para consolidarse en Primera: una plantilla joven y con hambre, un entrenador "de la casa" como el `Pitu´ Abelardo y una espectacular masa social empujando por detrás. Apenas un año después, todo se ha desmoronado. Los jugadores clave se han marchado, la afición ha dejado de sentirse reflejada en sus futbolistas y el equipo ha regresado a Segunda después de una de las temporadas más calamitosas que se recuerdan en Gijón. ¡Ver para creer!

Empezar de cero

Como no podría ser de otra forma, el Sporting ha llevado a cabo una auténtica revolución con respecto a su plantilla y cuerpo técnico para tratar de volver a la élite lo antes posible. Cuando un proyecto termina, otro debe arrancar…

Empezando por el banquillo, el nuevo director deportivo, Miguel Torrecilla, decidió apostar por Paco Herrera, un entrenador experimentado, que ya ha conseguido ascender con el Celta de Vigo y la UD Las Palmas, para dirigir a ras de césped el nuevo proyecto.

Con respecto a la plantilla, muchos han sido los futbolistas que han abandonado la disciplina rojiblanca para continuar sus carreras deportivas en otros clubes e incluso otros países.

En la portería, `Pichu´ Cuéllar cambia Gijón por Leganés. La necesidad de reducir el tope salarial y la presencia de Mariño como su recambio natural han sido los detonantes de la salida del emeritense.

Cuéllar durante un entrenamiento del pasado curso // Imagen: Diego Blanco
Cuéllar durante un entrenamiento del pasado curso // Imagen: Diego Blanco

En defensa, la pérdida más dolorosa ha sido la de Jorge Meré. El joven zaguero decidió no continuar su carrera en el Sporting después del descenso y, tras un pequeño culebrón, fichó por el Colonia Alemán. A la salida de Meré hay que sumar las de Fernando Amorebieta, con destino Independiente, y Julio Rodríguez, que tras una año cedido en el Burnley inglés se va al Recreativo de Huelva. Además, Douglas Pereira y Elderson Echiéjilé concluyeron su cesión en el Sporting y regresaron a sus respectivos clubes.

En el centro del campo, cabe destacar las salidas de Xavi Torres, Nacho Cases, Álvaro Bustos y Víctor Rodríguez. Asimismo, Mikel Vesga, clave en la segunda mitad de la pasada campaña, regresó al Athletic una vez completada su cesión.

Cases abandonó la disciplina del Sporting para irse a Tailandia // Imagen: Diego Blanco
Cases abandonó la disciplina del Sporting para irse a Tailandia // Imagen: Diego Blanco

En la parcela ofensiva, tres han sido las salidas: Duje Cop, Burgui y Akram Afif. Todos ellos estaban cedidos en el Sporting por lo que su no continuidad tras el descenso se daba prácticamente por hecha.

Del mismo modo, muchas han sido las caras nuevas, y no tan nuevas, que han aterrizado en Gijón este verano. Federico Barba, Juan Quintero y Xandao competirán con Babin por un puesto en el eje central de la zaga. Álex Bergantiños, por su parte, acompañará a Sergio Álvarez en la medular. Por delante, Rubén García extremo procedente del Levante y del que se esperan grandes cosas en el Sporting, Stefan Scepovic, un viejo conocido de la afición asturiana, y Michael Santos, recién llegado del Málaga, serán los encargados de golear en El Molinón.

Rubén García es uno de los fichajes que más ilusionan // Imagen: Diego Blanco
Rubén García es uno de los fichajes que más ilusionan // Imagen: Diego Blanco

No se debe olvidar la incorporación de futbolistas procedentes del filial y la vuelta tras cesión de jugadores jóvenes llamados a ser importantes en el futuro de la entidad, como son Pablo Pérez y Rachid. En el caso del argelino, su salida en forma de una nueva cesión es una posibilidad que se baraja a día de hoy en las oficinas de Mareo.

El templo rojiblanco

El que si continuará una temporada más al lado de su equipo es El Molinón. Este centenario estadio, el más antiguo del fútbol español, lleva albergando los encuentros que el Sporting disputa como local desde 1915. Incluso fue sede del Mundial celebrado en España en 1982. ¡Casi nada! De ahí que se haya ganado el apodo cariñoso de "el templo".

Actualmente, El Molinón posee un aforo cercano a las 30.000 localidades, gracias a las múltiples reformas llevadas a cabo entre 2009 y 2011 que le han llevado a obtener la categoría 3 de la UEFA. Cada vez que el Sporting juega como local es posible verlo completamente abarrotado y es que no en vano es el hogar del equipo con más socios de la categoría de plata del fútbol español. Al menos, por el momento.

Panorámica del municipal gijonés en día de partido // Imagen: Real Sporting
Panorámica del municipal gijonés en día de partido // Imagen: Real Sporting

Una elástica con mucha historia

Este año, al igual que los anteriores, el Sporting de Gijón ha optado por una primera equipación de corte tradicional, a rayas rojiblancas, aunque con la espalda completamente roja. La principal novedad que se presenta con respecto a otras temporadas es el patrocinador "Teslacard" en lugar del clásico "Gijón", de pasados cursos.

El Sporting ha presentado sus nuevas equipaciones por las calles de Gijón // Imagen: Real Sporting
El Sporting ha presentado sus nuevas equipaciones por las calles de Gijón // Imagen: Real Sporting

En la segunda equipación se ha apostado decididamente por la innovación, con una camiseta blanca, que el Sporting ya ha utilizado en varias ocasiones a lo largo de su historia, pero con un degradado en tonos negros presente en las mangas y en la parte inferior del pantalón. Asimismo el escudo aparece también con tonos blancos y negros en detrimento del original en rojo, blanco y dorado.

El marketing manda y, al igual que muchos otros aspectos presentes en el llamado "fútbol moderno", las equipaciones han dado un giro radical a lo largo de la historia.