Como ya confirmó en la rueda de prensa de presentación el nuevo míster Joan Marmol, "cuando se construye algo nuevo se necesita savia nueva, y se ha hablado con pocos jugadores de la temporada pasada, por su gran temporada pasada lo normal es que encajen en equipos de Segunda B". Así como explicaba el nuevo entrenador, ya son muchos los que se han reubicado en la categoría de bronce: Craviotto y Sascha en el Cornellà, Mario en el Talavera y Niko Kata en el Atlético Saguntino.

En cambio, otros como Alan (Italia), Jordi Cesar (Suiza) o Matías Draghi (Argentina) han probado por buscar una salida en el extranjero, así como algunos como David Jiménez, hijo pródigo de la entidad, se ha reubicado en Tercera División (Europa). 

Pese a ello, aún quedan multitud de jugadores de los que lograron la proeza de colocar al equipo décimo que no han oficializado su destino. Empezando por el pichichi de la categoría, Boris Garrós, quien se llevó las portadas de la salvación después de cuajar una temporada perfecta. Así como Boris, otros jugadores también claves como Héctor Camps, Reche o Pla no han hecho oficial su destino.

De la misma manera, otros jugadores como el polivalente Fernando Losada, con rumores de multitud de ofertas de Sabadell o Hospitalet entre otros, tampoco han hecho oficial su destino, aunque es probable que en los próximos días se confirme su salida rumbo a algún conjunto de Segunda B o Tercera. 

El CF Gavà, a la espera de oficializar movimientos, regresará a los entrenamientos el próximo jueves día 20 de julio en una sesión de tarde en Can Tintorer, para la que se esperan cerca de 25 jugadores, quién sabe si algún repetidor de la plantilla que salvó la categoría en el Grupo III de Segunda División B.