Volvia la competición oficial para Unión Popular de Langreo y Club Deportivo Colunga, y lo hacía en un entorno poco habitual para ambas escuadras. El Florán de Sotrondio, casa del San Martin E.I., acogía el primero de los encuentros que el Unión jugará allí como local, debido a las obras en el césped y banquillos del Nuevo Ganzábal. No es nuevo este exilio para el conjunto langreano, ya que hace varios años, cuando el Nuevo Ganzábal sufrió su gran remodelación, El Florán fue la casa del equipo.

Salió el conjunto de Hernán con algunas caras nuevas, principalmente las de Aimar Gulín, centrocampista riojano procedente del Haro y en el que hay puestas muchísimas ilusiones por parte de la parroquia langreana, y el delantero Polo. En el Colunga, también puesta de largo para algunas de sus caras nuevas, como el veteranísimo central Sergio Boris, el guardameta José Luis o el lateral zurdo, langreano y ex del Unión, Hugo Sánchez.  

La primera parte tuvo un dominador claro, que fue el Langreo. Si bien es cierto que se veían los claros síntomas de las fechas en las que se encuentran. Intentaba crear peligro el conjunto de Hernán, sobre todo en las botas de Omar Sampedro, y de un Aimar Gulín con muchas ganas de agradar en su debut. El Colunga se mantenía a la expectativa y esperaba a encontrar alguna acción de contragolpe. 

La primera ocasión llegó rondando el cuarto de hora de partido, con un balón muerto al borde del área que enganchó de volea Nacho Calvillo para mandarlo alto. Tres minutos después fue Aimar quien cayó en el área reclamando derribo de Joel Carús, pero, en la continuación de la jugada, a punto estuvo Dani López de hacer el primero, pero José Luis achicó de maravilla. Llegaría el primer gol en el minuto 23, de la manera en la que menos gusta al entrenador que lo recibe. Córner a favor del Colunga, despeja el Unión, monta la contra buscando a Omar, que regateó, corrió y aguantó a la llegada de Polo para ponérsela a placer. Primer tanto del delantero gijonés con la zamarra langreana. Buscó el Colunga la reacción, primero tímidamente con un disparo alto lejano de Dani Girol, y después, en la más clara de la primera mitad, en un balón muerto dentro del área pequeña en el que Nacho Quintín golpeó alto. Descanso.

La segunda parte arrancó con dos mazazos para los colungueses. A los dos minutos, centro de Aimar desde la derecha y testarazo inapelable de Polo a la red. Conexión de dos recién llegados que pueden hacer muy buenas migas en el verde. Sólo cinco minutos después, la sentencia... o eso parecía. Pase estratosférico de Nacho Calvillo para Aimar Gulín, que controló de zurda, y batió por bajo con diestra. Golazo.

A partir del tercero, el Colunga buscó el tanto que maquillase el marcador, y lo encontró en las botas de un Naya que empujó a la red una maradoniana carrera de Zucu. A seis minutos del final, llegó el 'run run' a la parroquia local, cuando Busta hizo un golazo de vaselina tras la peinada de Usillos

La cantera langreana, muy presente

No sólo la victoria y los tantos de los jugadores nuevos fueron las notas positivas del Unión, ya que dos futbolistas del filial, el Langreo Eulalia, debutaron y con una buena actuación. Joan, centrocampista llegado al filial esta temporada, y que la pasada campaña la disputó primero en el Real Oviedo de División de Honor y después en el Lenense de Tercera División, cuajó muy buenos minutos en la posición de pivote, organizando con criterio. El otro debut fue el de Luiyi. El rapidísimo jugador de ataque a punto estuvo en dos ocasiones de hacer gol en su puesta de largo. Primero envió alto en carrera un pase atrás de Polo, y después se le escapó por muy poco un mano a mano rozando el palo.