Quique González, delantero de la Unión Deportiva Almería, ha sido el encargado de desfilar este jueves por sala de prensa para dar voz al vestuario rojiblanco y reflejar sus sensaciones sobre la imagen ofrecida por su equipo en Ponferrada, así como para explicar cómo afronta el encuentro del próximo domingo ante el Bilbao Athletic, al que ha calificado como "un equipo alegre y con mucha calidad".
En primer lugar, dado que fue uno de los protagonistas del envite en el Bierzo anotando dos goles, que se unen a los nueve ya sumados en Liga, ha ilustrado cómo vivió él mismo la jugada del primer tanto, empujando a la red con el pecho un pase lateral: "Tienes que tener fe en que el centro va a ir al primer palo. Es un balón de Dubarbier muy fuerte al que llego en velocidad y la primera intención era rematar de cabeza, pero al final tienes que decidir en milésimas de segundos. Eché la cabeza para atrás para darle con el pecho con tan buena suerte que salió bien".
Como añadido a lo antes comentado, ponía sobre la mesa las claves para que el choque ante los de Fabri se diera según los intereses rojiblancos de principio a fin: "Empezamos muy bien, teniendo la pelota y el gol de Juan (Ramírez) nos dio un poquito de calma. De todas formas, el partido no fue tranquilo, ni mucho menos, pero sí que gozamos de muchas ocasiones para haber ganado por más diferencia".
"Me siento bien y con confianza"
"Me siento bien y con confianza", ha asegurado refiriéndose a su situación personal en el equipo, del que es máximo goleador en el presente curso futbolístico, para seguidamente garantizar que siempre trabaja para dar el máximo, aunque veces las cosas salgan mejor o peor. En este sentido, ha querido echar la vista atrás y recordar cómo fue su desembarco en Almería, de donde tuvo que emigrar rumbo Santander en busca de minutos: "La temporada pasada empecé a vivir el fútbol profesional. En el primer tramo no tuve minutos y en Santander jugué prácticamente todo. Este año también lo estoy haciendo y la mejor manera de acabar es manteniendo la categoría".
De esta manera, el vallisoletano no está haciendo otra cosa que recoger los frutos de una siembra que viene realizando desde principio de campaña y que tiene en el trabajo y en la humildad sus principales credenciales: "No es fácil jugar tantos partidos en Segunda División, pero uno trabaja y se cuida para ello. Yo quiero ayudar al Almería y como mejor puedo hacerlo es marcando goles. Tengo claro cómo tiene que afrontar una persona la vida y es con humildad. Yo soy así y punto, no tengo por qué dar que hablar".
Los peligros del Bilbao Athletic
Centrando sus miras ya en el choque ante el Bilbao Athletic, el "9" unionista ha abogado por no especular en ningún momento y salir al césped del Mediterráneo con la ambición por bandera: "El Almería quiere salir de la situación y eso es lo importante. Tenemos que ir con la mentalidad de, cuando metamos un gol, ir a por el siguiente. El domingo viene un rival que juega muy bien al fútbol y si nos relajamos, nos puede pintar la cara". Un conjunto, el de Ziganda, que según ha confesado el punta almeriensista, cuenta con unos jugadores que quieren llegar a la élite, que tiene mucha calidad, pero que quizá peque un poco de errores propios. "Es un equipo muy alegre, con mucha calidad que nos puede hacer mucho daño como le dejemos espacios", ha subrayado.
En la jornada que arrancará el próximo sábado se dará la tesitura de que el Almería conocerá el resultado de los partidos disputados por sus rivales más directos antes de salir al terreno de juego, algo que para Quique puede ser positivo para afrontar el choque con más motivación: "Partiendo de la base de que tenemos que salir a ganar, si los rivales pinchan, a ti te da un plus porque sabes que si ganas sacarás más ventaja".
Acto seguido, tildaba de "anecdótico" el hecho de verse fuera del descenso después de 28 jornadas consecutivas en él, a la par que matizaba sentirse feliz por haberlo logrado. "No ha sido fácil, hemos sufrido mucho, y así se trabaja muchísimo mejor durante la semana", ha subrayado. "No queremos apijotarnos y volver a meternos ahí, porque nunca se sabe si no vas a poder volver a salir", apostillaba
Para finalizar su comparecencia ante los medios, González ha querido mandar un mensaje de agradecimiento a la afición indálica, que está siendo un pilar fundamental en una campaña que se torció desde un principio: "Queremos agradecer a toda la gente que acude al campo, que nos ve por la tele y que se desplaza a la ciudad que sea. Sabemos que la temporada no está siendo la deseada, pero esto es fútbol, nosotros damos todo siempre y esperamos dedicarles muchas victorias y, sobre todo, esa salvación".