La Unión Deportiva Almería avanza en su preparación del envite que el próximo domingo le enfrentará al Levante Unión Deportiva, y lo ha hecho con una nueva jornada de trabajo con Luis Miguel Ramis al mando. Y es que después de una primera toma de contacto entre el nuevo técnico unionista y sus jugadores, en la mañana de este jueves el cuadro indálico ha llevado a cabo una sesión preparatoria que ha tocado todos los "palos".

En primera instancia, en las tripas del Estadio de los Juegos Mediterráneos ha tenido lugar un análisis del rival mediante vídeos y ya, sobre el césped del Anexo, la plantilla ha realizado un leve calentamiento para, posteriormente, completar un circuito que buscaba potenciar la fuerza y la resistencia física a través de sentadillas o abdominales, entre otros.

Después, el balón ha pasado a un primer plano y ha copado la parte de la sesión restante. Las directrices por parte del cuerpo técnico estaban claras: mover el cuero en pocos toques, haciendo partícipes al máximo de futbolistas posibles de la circulación del mismo y efectuar una presión instantánea al contrario en caso de pérdida de la posesión. Las porterías y los guardametas se han ido incorporando al trabajo con el grupo de forma paulatina.

El entrenamiento de la matinal del jueves ha contado con las ausencias de Borja Fernández, que ha estado al margen realizando un trabajo específico; de Javi Álamo y de Karim Yoda, lesionados estos últimos y que, además, son bajas confirmadas para Valencia. Por ello, para suplir las bajas de dichos componentes del plantel, y al igual que ocurriera el pasado miércoles, Luis Miguel Ramis ha contado con la presencia de Albert Batalla, Gaspar Panadero y Javi Moreno, todos ellos del filial.

Este viernes, el equipo almeriense llevará a cabo una nueva jornada de preparación, la penúltima de la semana.