Victoria del Almería para creer que competir un año más en Segunda División está más cerca que nunca de ser una realidad. Los rojiblancos se impusieron al Mirandés, que con esta derrota consuma ya su descenso matemático, gracias a dos goles de Quique González y se sitúan con 48 puntos en la tabla clasificatoria.

La confrontación entre andaluces y burgaleses no pasará a la historia por el fútbol desprendido por uno y otro equipo. Ambos, presos de la necesidad, incluso de la ansiedad, protagonizaron un partido propio de la categoría, en el que ninguno fue dominador claro y en el cual los detalles resultaron ser decisivos. 

En cualquier caso, tres saques de esquina consecutivos resultaron ser la carta de presentación de los locales, que, sin embargo, no terminaron de dar continuidad a sus buenos propósitos iniciales. Acto seguido, el Mirandés se hizo con el balón y los de Ramis se dedicaron a perseguir sombras y a aguardar un posible error del rival que llegó hasta en dos ocasiones pero que no pudo ser aprovechado por Fidel, en primera instancia, y por Marco Motta, posteriormente. 

Quique González abre la lata

Parecieron espolear al conjunto andaluz las intentonas marradas y, sin tener demasiado el control del esférico y haciendo alarde de cierta imprecisión, supo poner en ciertos apuros a Sergio Pérez. En estas llegó el primer tanto de la tarde gracias a un balón colgado que Borja envió a Antonio Puertas, este buscó un pase de la muerte en el área pequeña, pero el arquero despejó de manera defectuosa, de tal forma que la pelota llegó con vuelo a la zona de influencia de Quique, quien remató de chilena a escasos metros de la línea de gol para poner el 1-0 en el luminoso.

Quique puso el 1-0 con una chilena bien ejecutada.  (FOTO: Diego Carmona - VAVEL)

El triunfo momentáneo terminaría de posar al cuadro del Mediterráneo sobre el verde, que protagonizó hasta tres oportunidades claras para haber aumentado la renta anotadora. Fueron Nano, Fidel y, de nuevo, Quique quienes lo intentaron sin éxito antes de enfilar el túnel de vestuarios en busca de un resuello que les hiciera afrontar con garantías el segundo acto de la confrontación. 

El inicio del mismo supondría ser una declaración de intenciones por parte de los de rojo y blanco. Si bien estos en ocasiones se encontraban a merced del Mirandés, cuando se valían de los espacios dejados atrás por la zaga burgalesa con sus hombres más incisivos como principales baluartes dejaban patente la calidad y las capacidades ofensivas que atesoran. La opción más clara la tuvo José Ángel Pozo, al que la suerte del gol le está siendo esquiva durante todo el curso; el malagueño se encontró con una dejada de Antonio Puertas justo enfrente del arquero visitante y, con todo a favor, no fue capaz siquiera de encontrar los tres palos.  

No hubo tiempo para lamentos porque a los de Pablo Alfaro no les quedaba otra que poner toda la carne en el asador en busca de un milagro que les permitiera seguir creyendo en una permanencia más que utópica.

Sentencia rojiblanca

Sin embargo, las esperanzas visitantes terminaron por diluirse con el tanto de la sentencia del Almería. Quique aparecía otra vez para superar a todos, incluso a sí mismo, enviando al fondo de las mallas un servicio de Nano, que aún guardó fuerzas para internarse por su banda en el minuto 83 de partido, y echándose al zurrón el decimosexto gol de la temporada, sumando uno más que todo el ejercicio pasado, con dos encuentros aún por disputarse.

Nano y Motta se abrazan a Quique para celebrar el gol de la sentencia. (FOTO: Diego Carmona - VAVEL)

Al final, los tres puntos se quedaron en tierras andaluzas y dejan a los indálicos rozando la permanencia en Segunda División con la punta de los dedos. La necesidad con la que tengan que viajar a Getafe dependerá en buena medida de lo que hagan sus rivales más directos en la jornada de este domingo. En el lado opuesto, está un Mirandés que ya es matemáticamente equipo de Segunda División B y que cierra, de esta manera, un año aciago en el que fue de más a menos y en el que ha visto cómo hasta cuatro técnicos han pasado por su banquillo.