Si la temporada pasada Javi Álamo pasó prácticamente desapercibido por culpa de una lesión que le mantuvo en el dique seco desde el mes de marzo y que le impidió volver a vestirse de corto, el curso que va a comenzar de manera inminente este fin de semana no ha deparado mejor suerte para el extremo canario, que tras completar con normalidad el periodo de preparación, cayó lesionado en el último partido amistoso del verano ante el Granada.

Al que fuera futbolista del Girona se le ha diagnosticado una distensión en los isquiotibiales de la pierna derecha, motivo por el cual será baja de cara a la primera jornada de Liga que el próximo domingo enfrentará al Almería y al Nàstic en el Nou Estadi de Tarragona. En cualquier caso, desde el club andaluz se congratulan de que la dolencia del de Gáldar no haya sido tan importante como en un principio podría esperarse.

Cabe recordar, asimismo, que el jugador isleño aterrizó en el Mediterráneo el pasado mercado de invierno y que estampó su firma en un contrato que le une a la entidad de la Vega de Acá hasta el 30 de junio de 2018.

De esta forma, Luis Miguel Ramis no tendrá a su disposición un extremo derecho puro para la cita inaugural del torneo doméstico, dado que a la baja de Álamo se une la de Nauzet Alemán, que necesita entre cuatro y cinco semanas, como él mismo aseguró, para poder ponerse a punto y estar presto y dispuesto para competir. Por este motivo, el preparador catalán podría usar a Gaspar Panadero en el flanco diestro del ataque para desenvolverse a pierna cambiada, siempre y cuando Fidel hiciera las veces de extremo izquierdo. No obstante, ambos futbolistas pueden intercambiar posiciones entre sí, como ya han hecho en más de una ocasión.