Aunque ahora están asentados en la élite del fútbol español, las historias de la Unión Deportiva Las Palmas y el Málaga siempre no siempre han sido tan felices. De hecho, uno de los precedentes entre canarios y andaluces viene fuera del fútbol profesional. La década de los 90 fue una etapa convulsa para unos y otros. Los amarillos participan por segunda vez en toda su historia en la Segunda División B, mientras que los malacitanos, en aquel entonces con la denominación de Atlético Malagueño, trataban de sentar las bases del Málaga que el lector conoce hoy en día.

Hay que ponerse en situación. Las Palmas afrontaba un período más que frágil. Después de haber estado casi veinte años de manera ininterrumpida en Primera División, el equipo canario consumó dos descensos de categoría en menos de cinco años, llegando por primera vez en toda su historia a la Segunda División B en la temporada 1992/93. El objetivo en aquel entonces era más que claro: retornar al fútbol profesional.

Una etapa para olvidar en Segunda B

Durante la fase regular, la Unión Deportiva arrasó en el Grupo IV. Sólo perdió un partido en toda la temporada y acabó en primera posición aventajando al segundo clasificado, el Xerez, en ocho puntos. La debacle del equipo se efectuó en los play-off de ascenso. Por aquel entonces no se disputaban eliminatorias a ida y vuelta como ahora, sino que los cuatro clasificados de cada grupo jugaban una liguilla también en cuatro grupos diferentes. Ascendía pues el primer clasificado de cada cuadro. Las Palmas acabó tercera, por detrás del Salamanca y del Hércules, siendo los alicantinos los que subieran a Segunda División.

El Atlético Malagueño por su parte, afrontaba por primera vez en 1992 su periplo como equipo representativo de la ciudad. El equipo se había fundado en 1948 como filial del antiguo CD Málaga pero sus directivos separaron el primer equipo del segundo dado que éste estaba a punto de desaparecer. Antes de tomar la denominación de Málaga CF, el Malagueño fue el equipo más importante de la ciudad y en la 1992/93 logró el ansiado ascenso a la Segunda División B.

Fue entonces, en la temporada 1993/94, donde los caminos de la Unión Deportiva y el Atlético Malagueño se cruzaron. Ambos tenían objetivos más bien diferentes: el equipo canario tenía que ascender de una vez por todas y los andaluces trataban de consolidar la permanencia. Al final, ni unos ni otros lograrían su meta.

Las Palmas ganó sus dos enfrentamientos con el Malagueño

Las Palmas aterrizó en Málaga a finales de enero de 1994. Era líder del Grupo IV empatado a puntos con el Extremadura y otra vez uno de los candidatos para ascender de categoría. El Malagueño en cambio estaba en puestos de descensos y con bastantes problemas fuera de los terrenos de juego. De hecho, esa misma temporada el equipo malacitano tuvo hasta seis entrenadores diferentes. El ocupante del banquillo contra Las Palmas fue el uruguayo Voltaire García.

El partido tuvo muy poca historia. Las Palmas tenía que hacer valer su condición de favorito y en la primera parte sentenció el choque. Primero Verona y después Robaina en el tiempo de descuento pusieron un 0-2 imposible de superar para el Atlético Malagueño. Aquella victoria, unida al empate del Extremadura en el derbi con el Cacereño, hicieron que la Unión Deportiva fuera líder en solitario.

Ascenso frustrado y descenso evidente

Muy poco duró la alegría en la isla. Finalmente, Las Palmas disputó los play-off de ascenso como segundo clasificado tras el Extremadura. Y otra vez en la fase final, el cuadro amarillo se quedó a las puertas. A sólo un punto del Salamanca, los canarios se quedaban una temporada más en Segunda División B. El ascenso no se llegaría a consumar hasta la temporada 1995/96.

El Atlético Malagueño empezó su caída libre tras aquella derrota contra Las Palmas. Acabarías descendiendo de categoría como antepenúltimo clasificado, a seis puntos de la salvación. Eso sí, las bases del Málaga actual y a partir de  finales de los 90, el cuadro malacitano lo único que hizo fue crecer hasta convertirse en uno de los equipos más atractivos de LaLiga Santander.