A nadie le gustaría estar en el sitio de Cesare Prandelli ahora mismo. Llegó para rescatar a un Valencia hundido, sin rumbo. Y de hecho, no empezó mal, pues ganó por 1 a 2 en el campo del Sporting de Gijón en su primer partido, pero no ha vuelto a ganar un partido en competición doméstica. El italiano ya ha introducido la primera variante táctica, que es la del 3-5-2, con defensa de 3 formada por Abdennour, Mangala y Garay, Cancelo y Siqueira de carrileros, Mario Suárez, Parejo y Enzo/Medrán en el medio, y en punta Rodrigo y Munir.

De momento, no se ha visto mal juego de los valencianistas, pero tampoco se ha visto una victoria. La semana pasada consiguieron remontar el gol tempranero del Málaga, pero en la última jugada del partido los andaluces anotaron el gol del empate, hiriendo -aún más- al Valencia. 

Pero Prandelli podría intentar un 4-4-2 este fin de semana, en el partido que enfrenta a los valencianistas con la Real Sociedad en Anoeta. Porque si las cosas iban mal, esta semana se han puesto peor. Garay se ha lesionado y tiene por tres semanas. El otro central titular del Valencia, Eliaquim Mangala, tiene unas molestias y hasta el último momento será duda para el partido en San Sebastián.

Por lo tanto, el técnico italiano podría probar con una defensa formada por Montoya, Abdennour, Aderllan Santos (que no convence nada) o Javi, un canterano que ha sido convocado para viajar con la expedición valencianista, y quién sabe, si podrá salir en el once inicial. En la parte de arriba, es probable que se vuelva a repetir la asociación Munir-Rodrigo, que fue lo más destacado del partido ante el Málaga, pues ambos cuajaron una buena actuación ante los andaluces.

Son muchos los problemas que tiene Prandelli con su equipo, pero lo que está claro es que va a seguir buscando la solución.