Bonito duelo el que se vivirá en Mestalla el próximo miércoles a partir de las 18:45. Los Valencia-Real Madrid siempre son duelos igualados a la par que calientes, y no se espera que este sea una excepción.
No hay mejor momento para recibir al Madrid
Aunque el Valencia se encuentre en la decimoquinta posición, y esté cuajando una de las peores temporadas de su historia, ciertamente, este es el mejor momento para recibir al Madrid. Dejando a un lado el doloroso 0-4 frente al Eibar, los de Voro acumulan ya muchos partidos dejando buenas sensaciones. Frente al Athletic Club vimos la confirmación de un equipo que está tratando de levantarse de sus propias cenizas. Un equipo ordenado que sabe a lo que juega. Un equipo ordenado y solidario. Pero sobre todo, un equipo que está recuperando la confianza en si mismo partido tras partido.
Es correcto que no hay mejor momento que este para recibir al Madrid. Sin embargo, una derrota dura de los de Mestalla sería un enorme paso atrás en todo ese proceso de recuperación de confianza que Voro ha llevado a cabo. Hay algo más que tres puntos en juego mañana, de hecho, en un Valencia-Real Madrid, siempre hay algo más.
Mestalla, sinónimo de problemas para el Real Madrid
Desde siempre, la rivalidad Valencia Madrid ha sido grande, por ello, Mestalla siempre ha sido un campo complicado para el equipo entrenado por Zidane. Ni el año pasado, ni el anterior fue capaz el Madrid de lograr la victoria. El año pasado por un cabezazo "in extremis" de Alcácer que salvó a los suyos, y hace dos años, con aquella mágica victoria de los de Nuno.
Mañana no será distinto. Mestalla se vestirá con sus mejores galas, concretamente, con un traje de 55.000 aficionados que colgaron el lunes por la mañana el cartel de "no hay entradas", para un partido que se va a disputar un miercoles a las 18:45. Pese al triste horario, Mestalla va a ser una caldera, o por lo menos va a haber mucha gente, luego, el ambiente dependerá de las sensaciones que vaya dejando el equipo, pero salvo debacle mayúscula, la afición estará ahí
Los dos fichajes encabezan a sus equipos
Nadie esconde que una de las mejores decisiones del proyecto Lim, ha sido la contratación de Orellana. El chileno solo ha jugado 2 partidos, pero ha sido el mejor en sendos encuentros. Frente al Athletic club fue un dolor de muelas para la zaga bilbaína. El propio Valverde lo dejó claro: "en la posición de enganche, es muy complicado parar a alguien como Orellana" no se equivocó en absoluto.
Tan bueno está siendo el rendimiento del chileno, que el pasado domingo dejó a Carlos Soler en el banquillo, el que para muchos estaba siendo el mejor jugador de la temporada. No sería novedad que el chino Soler se mantuviera en el banquillo y que Orellana siguiera de enganche.
Y por parte del Real Madrid, su particular fichaje de invierno es Gareth Bale. El galés volvió tras su lesión frente al español, y pese a que él mismo ha dicho que "necesita dos semanas para ponerse a tope", la carrera que se pegó el sábado y que acabó en gol, está al alcance de muy pocos jugadores.
Zaza no puede parar
Por fin. Zaza anotó su primer gol con el Valencia el pasado domingo y se quitó toda la presión de encima, o al menos, eso parece. Eso parece porque 1 gol en 9 meses nunca es suficiente para un delantero. Lógicamente es un buen comienzo para salir de una mala racha, pero el anotar gol no confirma nada. Zaza no puede parar de marcar o de generar peligro, solo así avalará los más de 16 millones que el Valencia tendrá que pagar si finalmente juega 10 partidos en lo que resta de liga.
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