Menos de una semana después de la trabajada victoria ante el Real Madrid y de la posterior derrota en Mendizorroza, el Valencia CF volvía a Mestalla en busca de la regularidad. Enfrente, el CD Leganés, equipo al que los ches ya habían derrotado en tres ocasiones esta temporada. Un buen pretexto para volver a la senda de los tres puntos y, por ende, alejarse de la zona roja de la tabla.

La insistencia che tuvo su premio

El partido arrancó disputado en el terreno de juego, mientras que en la grada Mestalla se iba llenando a cuenta gotas. Los de Voro, conscientes de la importancia de ganar, trataban de hacerse con la posesión en los primeros compases, mientras que los visitantes, muy ordenados sobre el césped, intentaban sorprender a la contra.

La primera ocasión corrió a cargo de Zaza, que remató de cabeza tras un córner, pero el remate se marchó por encima de la portería de Herrerín. Fue la única oportunidad que se pudo ver en unos primeros quince minutos de partido con muchas detenciones en el juego por las faltas. La segunda llegó cerca del minuto veinte, cuando el balón le cayó a Bakkali tras el rechace de la defensa rival. El belga se planto sólo ante el guardameta visitante, pero en el mano a mano erró el lanzamiento y el esférico se marchó por la izquierda de la portería.  

El Valencia CF se hizo poco a poco con la posesión, mientras que el Leganés mantenía la presión alta, aunque por el momento sin peligro para Diego Alves. La tercera ocasión para los blanquinegros salió de las botas de Parejo. El de Coslada lanzó una falta casi perfecta, pero Herrerín sacó una mano providencial y envió el balón a córner. Fue entonces cuando llegó el gol. Tras el saque de esquina, Mangala batió en segunda instancia al guardameta rival, que le detuvo el primer remate. De esta manera, el central francés, uno de los mejores del encuentro hasta el momento, se estrenó como goleador con la elástica che.

Con el gol los de Voro ganaron confianza y se acercaron todavía más a la portería visitante. La ocasión siguiente tuvo como protagonista a Carlos Soler, pero su remate de cabeza fue despejado por un rival. Se acercaba así el final de una primera mitad en la que el Valencia CF se hizo progresivamente con la posesión y en la que tuvo las ocasiones, una de ellas transformada en gol.

El Valencia CF hace bueno el gol de Mangala

La segunda mitad arrancó con varias internadas por banda del Leganés. No obstante, los visitantes no convirtieron estas internadas en ocasiones claras. Sí que lo hizo, de nuevo, Carlos Soler, que tras deshacerse de dos rivales se plantó sólo ante Herrerín, pero el guardameta tapó bien los huecos y detuvo el disparo del valencianista.

A raíz de esta ocasión volvió el guion de la primera mitad. El Valencia CF dominaba y llegaba a la portería rival, mientras que los visitantes buscaban la presión alta y sorprender a la contra. Las detenciones del juego también fueron protagonistas en este segundo período debido a las numerosas faltas.

Las ocasiones claras se hicieron esperar. No fue hasta el minuto setenta de partido cuando a punto estuvo Carlos Soler de poner el segundo en el marcador. El centrocampista disparó con potencia desde fuera del área, pero Herrerín estuvo atento para enviar el balón a córner.

Los minutos pasaban y pesaban para un Valencia CF que todavía no había hecho ninguna sustitución en el minuto 78 de partido. En cambio, el Leganés buscaba los balones largos por la banda para aprovechar la carrera de sus jugadores recién entrados. No obstante, el encuentro se puso de contra para los visitantes con la expulsión por doble amarilla de su capitán Alberto Martín. Los ches aguantaban con la posesión y afrontaban los minutos finales con superioridad tanto en el marcador como sobre el césped.

Sin nuevas ocasiones y haciendo valer el gol de Mangala, los valencianistas sumaron ante el Leganés tres puntos vitales para escalar posiciones y, sobre todo, alejarse del descenso