El domingo será un partido bastante tranquilo para el Submarino. Tras conseguir en Mestalla la cuarta plaza de forma matemática, recibirá al Deportivo de la Coruña, que llega al encuentro necesitado de puntos para no meterse en un lío mayor, y asegurar cuanto antes la salvación matemática. Históricamente, es un rival que siempre le ha costado a los amarillos, y muestra de ello son los datos conseguidos a lo largo de las temporadas que han coincidido en la máxima categoría del fútbol español.
En Riazor: cuatro victorias, tres empates y siete derrotas
En el estadio gallego, le costó al Submarino conseguir su primera victoria. De hecho, no fue hasta la quinta temporada en la máxima categoría cuando lo logró. En la jornada 13 de la 2003/2004, el Villarreal ganó 0-1, con gol de Roger en el minuto 88, sumando así tres puntos más para los de la Plana y la primera victoria visitante en territorio coruñés. Las otras tres victorias, llegaron en la 2005/2006 (0-2, goles de Riquelme y Sorín), 2007/2008 (también por 0-2, con los tantos de Matías Fernández y Guille Franco) y esta misma temporada (1-2, ambos conseguidos por Bruno, uno de ellos, de penalti en el último minuto del tiempo de descuento).
Ha empatado en tres ocasiones en el feudo blanquiazul, dos de esas veces por 1-1 (temporadas 2004/2005 y 2014/2015) y una 0-0 (2001/2002). La última derrota amarilla en Riazor tuvo lugar hace cinco años, en la jornada 23 de la temporada 2010/2011, cuando los amarillos cayeron por 1-0. Las otras seis derrotas, fueron las siguientes: 2-1 en la 1998/1999; 4-2 en la 2000/2001; 2-1 en la 2002/2003; en la 2006/2007, perdieron por 2-0; en la temporada 2009/2010, volvería a caer el Villarreal por 1-0, y con la mencionada anteriormente en la 10/11, se encadenaron tres temporadas consecutivas perdiendo en la ciudad gallega. La más contundente, sin embargo, fue el 3-0 que recibieron del Deportivo en la 2008/2009.
En El Madrigal: siete victorias, dos empates y cuatro derrotas
Unos datos muy similares ha conseguido el Villarreal en su propio estadio, registrando dos empates en 13 partidos, uno menos que en Riazor. Tuvieron lugar en la temporada 2001/2002 y en la 2005/2006, y en ambas ocasiones el resultado fue el mismo: 1-1.
Las cuatro derrotas acaecieron en las temporadas 1998/1999, por 1-2; y en la 2002/2003, 2004/2005 y 2006/2007, todas ellas por 0-2. Como dato a destacar de una de ellas, la que sufrieron los de Pellegrini en la 2004/2005 fue la única derrota como local del Submarino en toda la temporada liguera en su estadio, un curso que finalizaría con los amarillos como terceros clasificados, y con participación en la siguiente temporada en Champions League por primera vez en su historia.
La primera victoria en El Madrigal se produjo en la temporada 2000/2001, con resultado de 3-2. Los goles amarillos fueron obra de Moisés y Víctor (2), y los gallegos de Djalminha y del que años después sería jugador del Villarreal, Walter Pandiani. La siguiente se consiguió en la temporada 2002/2003, cuando el Submarino venció en la jornada seis por 3-1, con goles de César en propia puerta, Víctor Fernández y Belletti para los locales, y de Víctor Sánchez del Amo para los visitantes, el que es el actual entrenador blanquiazul. Hasta la temporada 2007/2008, la del subcampeonato, el Villarreal no volvió a vencer al Deportivo en El Madrigal, y el resultado no fue holgado precisamente. El partido concluyó 4-3, y los goleadores fueron Rossi y Tomasson (con sendos goles de penalti) y Nihat (2) para los locales; Sergio González (exentrenador del Espanyol), Pablo Amo y Guardado marcaron para los visitantes. Las siguientes tres temporadas, el Submarino venció con el mismo resultado a los gallegos: 1-0 en la 08/09, 09/10 y 10/11, las mismas temporadas que el Villarreal perdió en A Coruña de forma consecutiva. La última victoria como local se produjo la pasada campaña, por 3-0 en la jornada 16, con dos goles de Luciano Vietto y otro de Jonathan dos Santos.
De empatar el próximo encuentro, se igualarían los datos de ambos equipos en los 28 partidos disputados entre ellos, es decir, siete victorias locales, tres empates y cuatro victorias visitantes. Habrá que ver si la balanza se equilibra, o si se decanta a favor de uno de los dos equipos tras el encuentro del próximo domingo a las 17:00 h.