Previa Villarreal CF - Sevilla FC: mudar la piel para seguir adelante

El duelo entre el Villarreal Club de Fútbol y el Sevilla Fútbol Club será el que ponga el cierre a la jornada segunda del campeonato nacional de liga, y despida la competición durante unos días, para dar paso a los encuentros de las selecciones, bien amistosos o bien de clasificación para el próximo Mundial de Rusia en 2018. Por eso, ambos conjuntos quieren dar lo mejor de sí mismos y ofrecer a sus aficionados una victoria que les deje un buen sabor de boca en la breve pausa que tendremos a partir del lunes que viene. Dos equipos que, por razones diferentes, se han encontrado este verano con una reestructuración y una reinvención, más o menos profundas, de lo que venían siendo hasta el momento, y lejos de parecerse a los que se vieron las caras el pasado campeonato. La situación del Villarreal ha sido bastante dura y difícil, con Marcelino sentenciado primero y la eliminación europea después, mientras que la del Sevilla ha sido, por un lado, la típica situación que vive el conjunto hispalense verano sí, verano también: la venta de numerosos futbolistas de su plantilla, y la llegada de otros nuevos. Pero sobre todo, destaca la marcha de Unai Emery, técnico que ha cosechado una gran cantidad de triunfos con los andaluces en sus campañas en Nervión, y la consiguiente llegada de Jorge Sampaoli, con nuevas ideas y un nuevo estilo que rompe por completo con lo establecido por su predecesor todos estos años. Diferentes escenarios, diferentes motivos, pero habrá dos técnicos nuevos en los banquillos de El Madrigal el próximo domingo, y nuevos futbolistas en ambos bandos.

En el Villarreal sigue la resaca de la eliminación en Champions, aunque poco a poco se va mitigando y, viendo la rapidez con la que se mueve el mundo del fútbol en la actualidad, difícilmente se alargará mucho más. Primero, porque el viernes conoció la familia amarilla contra quien se verá las caras su equipo en Europa League, una competición que empieza a ser tradición en tierras villarrealenses, y en la que se ha logrado alcanzar las semifinales en tres de sus participaciones, una de ellas, el pasado curso. Y segundo, porque la nueva jornada de LaLiga Santander ya está aquí, y los de Escribá se verán las caras contra uno de los equipos más duros e importantes del campeonato español, el Sevilla Fútbol Club. Pese a las bajas, el Submarino afronta el encuentro con la mirada puesta en los tres primeros puntos de esta temporada, que le permitan coger confianza para afrontar el próximo mes el arranque definitivo de este curso, que también será exigente y duro para la plantilla amarilla. El Villarreal espera recuperar efectivos a la vuelta de los partidos de selecciones, para volver a tener a casi todos sus hombres disponibles para disputar Liga y Europa League, las competiciones que regresarán en septiembre.

Tras el varapalo en la Supercopa de Europa y en la Supercopa de España, el renovado Sevilla de Jorge Sampaoli afronta la segunda jornada del campeonato nacional con esperanzas de lograr los tres puntos de uno de los campos más difíciles de España, donde el curso pasado tan sólo vencieron tres equipos, y ninguno de los importantes; es decir, ni Real Madrid, Valencia, Atlético de Madrid, Athletic de Bilbao, o el propio Sevilla fueron capaces de sobrevivir a El Madrigal salvo el Barcelona, que empató a dos, y desde el conjunto sevillista no quieren que el Submarino coja ventaja respecto a ellos, ya que se espera que esta temporada vuelvan a ser rivales por las plazas europeas, si todo sigue su curso natural. Es más, no solo buscarán superar ese registro, sino que también querrán obtener algo que el Sevilla de Unai Emery no consiguió en toda la temporada liguera: una victoria lejos del Sánchez Pizjuán. El conjunto hispalense acabó la campaña pasada sin sumar tres puntos fuera, dato muy llamativo y clave para comprender por qué no fue un rival todavía más serio para la cuarta plaza de Champions, que acabó en manos amarillas. Todo ello con una apuesta futbolística directamente opuesta a la del técnico vasco, pero bastante atractiva, y que nos dejó con un partido en la jornada inaugural que tuvo un resultado más propio de tenis que de fútbol. Y el Sevilla de Sampaoli no ha hecho más que comenzar.

Tres puntos para la tranquilidad

Quién le iba a decir al aficionado amarillo al final de la temporada pasada, que en la segunda jornada de Liga no estaría Marcelino García Toral en el banquillo, y que su equipo, con el que tanto había disfrutado a lo largo de la temporada 2015/2016 no iba a ver recompensado todo su esfuerzo en esa campaña, porque caería eliminado en el tan ansiado play off de Champions League. Obviamente, la mayoría de aficionados no hubieran dado crédito ante semejantes afirmaciones, porque no cabía en la cabeza de prácticamente nadie de la familia amarilla la eliminación europea y, sobre todo, la marcha de Marcelino, técnico que les había devuelto a la máxima categoría y a la pelea por las plazas altas de la clasificación tras el traumático descenso a la Liga Adelante. Pero, esta es la realidad en la que vive el Villarreal a día de hoy. Sin embargo, en manos del equipo amarillo está el revertir la situación, y eso pasa por vencer al Sevilla este domingo.

Antes de estos caóticos quince días que han puesto patas arriba todo lo que se esperaba del comienzo de temporada, se había llevado a cabo algo que es bastante habitual en el Villarreal, y que se asemeja a lo que vive su rival de esta jornada, el Sevilla, cada periodo estival: la marcha de jugadores y la llegada de nuevos. Samuel García, Tomás Pina, Eric Bailly, Leo Baptistao, Adrián López, Alphonse Areola, Denis Suárez o Adrián Marín, fueron piezas importantes a lo largo de la temporada pasada, y algunos de ellos fueron responsables directos de los triunfos del Submarino Amarillo, tanto en Liga como en UEFA: Alphonse Areola fue el tercer portero menos goleado de la liga, encajando 26 goles en 32 partidos disputados, una media de menos de un gol por partido, solo superado por Claudio Bravo del Barcelona y Jan Oblak del Atlético de Madrid. No sólo eso, sino que el francés obtuvo el récord de imbatibilidad de la Liga BBVA la pasada campaña, acumulando 620 minutos sin encajar gol, y 664 minutos sin que nadie batiera su portería en El Madrigal. Denis Suárez fue el máximo asistente en Europa League, con seis asistencias que sirvieron balones de gol a sus compañeros, y siendo pieza clave en la competición europea. Pero no solo ellos abandonan la disciplina amarilla. También algunos de los jugadores que estaban cedidos se han desvinculado por completo del Submarino, y otros han sido traspasados también mediante préstamo: Moi Gómez, Javier Espinosa, Nahuel Leiva, Akram Afif, Aleksandar Pantic, Alfonso Pedraza, Sergio Marcos o Pablo Íñiguez. Con tanta baja en las filas del Submarino, era necesario hacer una inversión en futbolistas que mejoraran el nivel del pasado año, y eso es lo que se ha pretendido desde las oficinas de la Ciudad Deportiva del Miralcamp.

Con los casi 40 millones dejados por la venta de Eric Bailly al Manchester United (la venta más importante en la historia del club), se han llevado a cabo fichajes como el de Roberto Soriano (el futbolista más caro de la historia amarilla), Nicola Sansone, Andrés Fernández, José Ángel (estos dos últimos cedidos por el Oporto), Denis Cheryshev, Alfred N'Diaye y Alexandre Pato. Nombres bastante importantes y destacados para apuntalar un Submarino con unas miras más altas, o al menos esa era la idea inicial. Pero, si bien es cierto que todos estos futbolistas llamaban la atención de los aficionados amarillos, algunos por ser más conocidos que otros, y también por las cifras que se han manejado este verano con las compras de éstos, quizá una de las claves del batacazo en Champions ha sido precisamente eso, el baile de jugadores y la escasa adaptación de todos ellos a la filosofía amarilla, en el poco tiempo que llevan en la entidad. Y si entre entradas y salidas, se suman las lesiones de Jaume Costa, Jonathan dos Santos, Bakambu, Cheryshev (que fue fichado en proceso de recuperación de una lesión) y sobre todo, la de Soldado, se puede encontrar otro motivo de peso para explicar lo ocurrido en Champions.

Fue precisamente la lesión del ariete valenciano lo que propició la llegada del último refuerzo amarillo, Santos Borré, y antes de eso, tuvo lugar la destitución de Marcelino, por lo que la pérdida del "9" amarillo se podría catalogar como la gota que colmó el vaso en relación al míster asturiano. Las malas vibraciones y las sensaciones negativas parecen haber estado presentes durante todo el verano, ayudadas por el affaire de Musacchio con el Milan, la política de fichajes (que parece que no gustó demasiado al técnico), y algún problema interno con la directiva amarilla, todo ello desató la noche del 10 de agosto la marcha del asturiano, y la llegada al día siguiente de Fran Escribá, que se ha encontrado con un equipo en el que no ha tenido voz ni voto para armar, con numerosas lesiones, y sin tiempo para implantar sus ideas de cara a tratar de mejorar lo dejado por Marcelino. Un cóctel que ha estallado definitivamente el pasado martes, apartando al Submarino del sueño de la Champions.

Es por ello que el duelo del domingo se antoja vital para los intereses del Villarreal. Primero, porque supondría la primera victoria esta temporada; segundo, porque se vencería a uno de los rivales más fuertes del campeonato, y se demostraría que el Submarino Amarillo da la cara contra los grandes de nuestra liga; y tercero, para descansar durante el parón con la idea de que este equipo puede dar la cara en los momentos difíciles, y de paso, ganar confianza de cara al regreso de la competición.

Revolución en Nervión

Menos traumático ha sido el cambio de técnico en Nervión, pero no deja de ser un hecho muy importante para el futuro del Sevilla. Unai Emery ha dejado una huella imborrable en el sevillismo. Desde su llegada en enero de 2013, el míster guipuzcoano logró conquistar durante tres temporadas consecutivas la UEFA Europa League, un hito histórico en la competición, ya que ningún conjunto la había ganado tres veces seguidas. También ha supuesto que el Sevilla sea el club que más títulos tiene en la competición, sumando un total de cinco. Además, llevó a su equipo a la final de la Copa del Rey la pasada campaña, donde fue superado por el Barcelona; y a dos finales consecutivas de la Supercopa de Europa, cayendo contra los azulgranas y contra el Real Madrid. Además, obtuvo el acceso a la Champions League de la pasada campaña al conseguir el cuarto título en la historia del conjunto hispalense frente al Dnipro, en la temporada 2014/2015; y a la de ésta, tras derrotar en la final del pasado mes de mayo al Liverpool de Jurgen Kloop, que antes derrotó en semifinales al Villarreal. Tres años plagados de triunfos y recuerdos que los sevillistas siempre tendrán presentes en su memoria, pero con la marcha del técnico al Paris Saint Germain, se abre una nueva etapa.

Jorge Sampaoli llegó a Sevilla a comienzos de verano con una idea de fútbol claro, y ha quedado demostrado en los cuatro partidos oficiales que ha disputado el conjunto andaluz que es totalmente opuesta a la de Unai Emery. Mientras el técnico vasco apostaba por el músculo, la contundencia defensiva y la rapidez al contraataque, el argentino quiere que su equipo tenga la posesión, sea protagonista con el balón y todo ello con un sistema que dista mucho de lo que se puede ver en la actualidad en el mundo del fútbol, ya que tanto en los partidos de la Supercopa de España frente al Barcelona, como contra el Real Madrid en la de Europa, o frente al Espanyol en la primera jornada de Liga, ha mostrado un once con solo tres defensas, y delante, dependiendo de los efectivos que tuviera disponible o del planteamiento del encuentro, cinco centrocampistas y dos delanteros, o cuatro y tres arriba.

Una apuesta vistosa, que busca el fútbol de toque y control de la posesión, pero no exenta de riesgos. Se pudo observar en sus duelos contra los equipos catalanes, que tanto el Barcelona como el Espanyol le creaban numerosas ocasiones de peligro, y la línea defensiva corría muchos riesgos en momentos puntuales del partido. No en vano, el conjunto de Quique Sánchez Flores fue capaz de anotar cuatro goles en el Sánchez Pizjuán, algo que en la mayor parte de ocasiones le hubiera supuesto la victoria y la obtención de los tres primeros puntos en Liga. Pero el Sevilla de Sampaoli está demostrando en estos primeros partidos, que le da igual el equipo que tenga delante; van a apostar por llevar a cabo su fútbol y en la jornada anterior contra el Espanyol quedó claro que si bien le pueden encajar cuatro goles, ellos son capaces de meter seis. Dicho lo cual, el exseleccionador de Chile todavía tiene que ajustar los parámetros defensivos, y cuando lo haga, si sus jugadores se adaptan a su filosofía, puede convertirse en un Sevilla a tener en cuenta.

Y los jugadores precisamente han sido protagonistas también este verano, ya que muchos se han marchado, pero otros tantos han venido... y aún quedan días de mercado. En el apartado de salidas, han destacado por ser la mayoría bastante sensibles. Éver Banega, líder en el mediocampo del conjunto hispalense y pieza clave en el esquema de Emery; Krychowiak, que ha hecho el mismo viaje que el técnico vasco; Beto, que pese a que no tuvo mucha participación la temporada anterior, fue clave en la consecución de los títulos europeos; Coke, capitán estas últimas temporadas y hombre fuerte dentro del vestuario; Reyes, símbolo sevillista y que se marchó al Espanyol; o Kevin Gameiro, autor de 67 goles en tres temporadas en el Sevilla y delantero de referencia la pasada campaña tras la marcha de Carlos Bacca. Sustituir a todos estos y más que han dejado la disciplina hispalense ha provocado que Monchi haya tenido que buscar refuerzos para prácticamente cada demarcación del once inicial, siguiendo además la nueva filosofía de Sampaoli, por lo que el perfil de los recién llegados es diferente a los que el directivo sevillista hubiese buscado con Emery en el banquillo. En portería, acaba de llegar Sirigu del PSG; en defensa Gabriel Mercado, procedente de River Plate; en el medio del campo, Ganso (compañero de selección de Alexandre Pato), Kiyotake, Franco "Mudo" Vázquez, Correa y Sarabia; y la nueva delantera está compuesta por dos hombres: Ben Yedder y Luciano Vietto. Todos los veranos, los nuevos futbolistas que llegan a Nervión deben adaptarse al sistema de juego de su entrenador, y éste hacer lo que pueda para que los recién llegados entren en la dinámica del equipo y se obtengan resultados rápidamente. Esta vez, el técnico y jugadores son los que acaban de aterrizar, y la prueba la tendrán aquellos que han vivido estos años en el Sevilla de Unai Emery, porque la adaptación a una filosofía nueva es siempre difícil, y Sampaoli tiene una prueba complicada y exigente, porque el público del Sevilla se ha acostumbrado a lo bueno, y no pedirá menos a los que acaban de llegar.

Precisamente, entre los nuevos fichajes se encuentra un hombre que busca la reválida tras un difícil primer año en el Atlético de Madrid, y que es bien conocido en Vila-real: Luciano Vietto. El delantero argentino llegaba la temporada 2014/2015 al equipo amarillo, como una promesa de su país, y con el salto a Europa buscaba un club que le diera la oportunidad de crecer como jugador, y darse a conocer para progresar en su carrera deportiva. Y fue precisamente lo que consiguió en su único año en El Madrigal: anotó 12 goles en 32 partidos en Liga, y ocho goles en competición europea, ganándose un puesto en el once de Marcelino y formando una sociedad con Denis Cheryshev que fue letal en numerosos partidos del Submarino, siendo capaz de sentar al teórico titular del equipo, Giovani dos Santos. La excelente campaña de Vietto despertó el interés del Atlético de Madrid, que desembolsó la cantidad correspondiente a la cláusula del jugador, haciendo que el joven delantero hiciera las maletas rumbo al Manzanares. Pero su temporada con los de Simeone no fue precisamente la deseada para un recién llegado. Con una participación mínima en Europa (disputó cinco encuentros de los trece que jugó el conjunto colchonero en Champions y marcó un gol), y sin apenas minutos en Liga, donde acumuló 960 minutos de juego y solo anotó un tanto, propició que uno de los fichajes más caros de la pasada temporada del Atlético pasara a ser irrelevante, siendo superado por hombres como Ángel Correa o Fernando Torres, que vivió una campaña de lo más destacada. Es por eso que desde las oficinas del conjunto rojiblanco se tomara la decisión de que el jugador debía marcharse, y entre la oferta del Barcelona y la del Sevilla, el argentino se acabó decantando por la del conjunto andaluz, que por el momento le está ofreciendo minutos e importancia. Él ya ha obtenido rédito de esa titularidad que le ha brindado Sampaoli, anotando dos de los seis goles de su equipo la jornada pasada. Vietto vuelve a El Madrigal preparado para seguir sumando tantos a su haber particular, y puntos para su equipo.

Máxima igualdad frente al Sevilla

Si bien en el Pizjuán las estadísticas son bastante desfavorables para el Villarreal (solo tres resultados favorables en catorce partidos), en El Madrigal se igualan bastante los datos. En catorce partidos disputados en la máxima competición española, el Submarino Amarillo ha vencido en cinco ocasiones, ha empatado en otras cinco, y el Sevilla se ha llevado el triunfo en cuatro. Estadísticas que muestran el nivel tan parejo de ambos conjuntos cuando se ven las caras en el feudo amarillo.

En las cuatro últimas temporadas, contando las tres de Marcelino en Liga BBVA y la del descenso, junto al encuentro en Europa League en la 2014/2015, el Villarreal tan solo ha vencido en una ocasión, la temporada pasada en la jornada 10 por 2-1, con goles de Mario y Bakambu. El resto de resultados han sido un empate a dos (la temporada 2011/2012) y tres derrotas, dos ligueras (las temporadas 2013/2014 y 2014/2015) y otra en los octavos de Europa League por 1-3.

Declaraciones previas al partido

Fran Escribá compareció ante los medios este viernes, analizando el sorteo de Europa League, y el encuentro que su equipo disputará este domingo frente al Sevilla, calificándolo como un partido "dificilísimo", contra un conjunto "muy valiente, abierto y cambiando el físico por el talento", destacando además la llegada de Sampaoli, convirtiendo a los hispalenses en un equipo que "juega a golpear y tiene mucho para hacerlo". La forma que cree el técnico de contrarrestar la fuerza ofensiva de los andaluces es ser "un equipo que esté junto y que no encuentren espacios". Destacó también el técnico que para el partido recuperan a Sansone, ya que su baja era debido a que disputó la previa de Europa League con el Sassuolo, y podrían contar también con Denis Cheryshev, lo que supondría el regreso del hispano ruso a El Madrigal como jugador del equipo amarillo.

Jorge Sampaoli llega a Vila-real con la clara intención de romper la mala racha de resultados de la temporada pasada fuera de casa del conjunto sevillista, y para ello deben seguir practicando el fútbol que han llevado a cabo en los últimos partidos. "La idea es tratar de no modificar la conducta del equipo de acuerdo al escenario que le toque. Tenemos que buscar los tres puntos y no esperar que nos lleguen", destacó el argentino, que habló bien del Villarreal y su fortaleza en casa, y no dudó en apostar a que este difícil período cambiará con el paso del tiempo en Vila-real. "El Villarreal es un rival poderoso en su cancha que quiere curarse la herida de la eliminación en Champions, así que será un partido intenso y tendremos que estar bien emocionalmente. Han sufrido la transición del cambio de entrenador, que genera un reacomodamiento que necesita tiempo y lo han sentido. Poco a poco, con esta plantilla, estarán peleando por los primeros lugares como siempre en la última época". No obstante, también sabe que una buena forma de hacer daño al Submarino es precisamente aprovechar la situación complicada que se vive entre los amarillos. "Desde lo psicológico, el partido se dará de acuerdo al desarrollo. Si agudizamos su crisis les crearemos inconvenientes, pero si hacen un gol o nos dominan, se van a sentir más seguros. Intentaremos profundizar en esa crisis tratando de atacarles".

Pita Del Cerro Grande

El elegido para dirigir el encuentro de la segunda jornada, que se disputará el próximo domingo 28 de agosto a las 22:15 horas es Carlos del Cerro Grande.

El árbitro del colegio madrileño, que lleva en la máxima categoría del fútbol español desde hace cinco temporadas,  dirigió al Villarreal en cuatro encuentros la pasada campaña, y todos acabaron en victoria para los amarillos: contra la Real Sociedad en Anoeta (0-2), frente al Granada en El Madrigal (1-0), en Ipurúa en el encuentro contra el Eibar (1-2) y en Mestalla ante el Valencia (0-2).

Por su parte, arbitró al Sevilla en dos ocasiones: en el Sánchez Pizjuán ante el Sporting, partido en el que los hispalenses se impusieron a los asturianos por 2-0, y en la visita de los andaluces a Las Palmas, donde los de Unai Emery perdieron por 2-0 ante los canarios.

Convocatorias Villarreal-Sevilla

Villarreal: Sin confirmar

Sevilla: Sergio Rico, José Antonio Caro, Mariano, Rami, Pareja, Kolo, Mercado, Kranevitter, Iborra, Nzonzi, Ganso, Correa, Sarabia, Franco Vázquez, Vitolo, Kiyotake, Ben Yedder y Vietto.

Por parte del Villarreal, todavía no se ha dado a conocer los hombres que conforman la convocatoria para el encuentro, pero el técnico Fran Escribá avanzó en rueda de prensa que recuperan a Nicola Sansone, y que podría estar disponible también Denis Cheryshev, por lo que las bajas que tendría el Submarino serían las ya conocidas de Soldado, Bonera, Bakambu y Jonathan dos Santos.

En cuanto al Sevilla, Jorge Sampaoli recupera a Adil Rami y también podrá contar con Vitolo, que se recuperó de las molestias que arrastraba a lo largo de la semana. El último fichaje hispalense, el meta Sirigu, no entra en la convocatoria, mientras que tampoco lo hace Konoplyanka, que estaría cerca de marcharse de la capital andaluza.

Posibles onces del Villarreal - Sevilla