El Villarreal CF se enfrenta al Real Madrid sin conocer la derrota y con ocho puntos de 12 posibles en la tabla clasificatoria. Tres victorias  en tan solo nueve días, han llenado de moral y confianza al conjunto "groguet" para conseguir un resultado favorable en una de las salidas más complicadas, el Santiago Bernabeu. Por si fuera menos, los pupilos de Zidane atraviesan un momento excelente respecto a resultados en este inicio liguero, aunque el estilo futbolístico  pueda dejar dudas a muchos aficionados.

El pasado domingo, los pupilos de Zidane consiguieron el cuarto triunfo  consecutivo en Cornellá-El Prat con tantos de James y Benzemá. Una victoria que permite a los blancos seguir en lo alto de la clasificación con 12 de 12 puntos. En la quinta jornada, el Real Madrid tiene la primera de fuego ante uno de los equipos más competitivos de primera división.

La Liga entre ceja y ceja 

Los componentes de la plantilla merengue, así como su entrenador Zinadine Zidane han admitido de forma contundente que lo fundamental para el Real Madrid es conseguir la Liga Santander después de haber conquistado tan solo una en los últimas seis disputadas. Las declaraciones han ido acompañadas de hechos, en un arranque de liguero liguero con cuatro victorias, sumadas a las del anterior curso el Real Madrid supera el record del club con 16 triunfos ligueros seguidos.

Dicho lo cuál, la competición reina por excelencia para el Real Madrid es la Champions League, la cuál ha conquistado en dos de las últimas tres ediciones. El paso de las jornadas dirá si el Real Madrid ha aprendido de los errores cometidos y ha conseguido por fin una regularidad necesaria para alzarse con la Liga. 

Una de las claves pasa por la regularidad, que viene dada por la continuidad de una idea futbolística. Con una plantilla que mantiene casi intacto el bloque del pasado curso, Álvaro Morata y Marco Asensio han sido las dos únicas incorporaciones, además de Coentrao que regresaba de una cesión. En el aspecto de las salidas, el extremo Jesé ha sido el único en abandonar el conjunto blanco. Por tanto, la base del equipo es prácticamente idéntica, con un once tipo (4-3-3) que cuajó el pasado curso, pero con una plantilla competitiva y doblada en todos los puestos.

21 jugadores de primer nivel

Lejos quedan aquellos tiempos en los qué los grandes tenían un equipo A de primer nivel y un equipo B secundario. Las potencias como Real Madrid o Barcelona se refuerzan hasta tal punto de disponer de dos equipos competitivos y capaces de competir en cualquier campo.

En la portería, Kiko Casilla está deslumbrando y aprovechando a las mil maravillas la lesión de Keylor Navas para poner en aprietos al técnico francés para elegir un portero titular. Ante el Espanyol realizó dos paradas de gran mérito. 

En el aspecto defensivo, el Real Madrid ha arrancado concediendo ocasiones y goles a los rivales, pero tiene tanta dinamita en los últimos metros que te mata. En los laterales, Marcelo y Carvajal son fijos y se han ganado a base de esfuerzo convertirse en dos pilares fundamentales, aunque tanto Coentrao o Danilo son dos refuerzos de garantías. En la parte central, el capitán Sergio Ramos y un Pepe que ha crecido en madurez y contundencia, forman la pareja de centrales. 

En el centro del campo, todo gira en torno a Luka Modric, futbolista más importante en el juego del Real Madrid. Acompañado de Kross y Casemiro, que será baja ante el Villarreal, forman el trío que da un mayor equilibrio en la medular. Ante la baja del brasileño, las opciones son múltiples para Zidane, desde Kovacic, Marco Asensio, Isco a James. 

En la punta de ataque Cristiano Ronaldo y Gareth Bale regresan tras perderse el partido ante el Espanyol, Morata y Lucas Vázquez son las variantes que tiene Zidane en la punta de ataque. Una plantilla de lujo para optar por todos los títulos. El Villarreal deberá realizar un partido perfecto para asaltar el templo blanco y conseguir una victoria que sería histórica para los castellonenses.