Regresar a la máxima categoría del fútbol español no es tarea fácil en principio. A unos equipos les cuesta más adaptarse a la élite de nuestro fútbol, aunque otros ascendidos como el Leganés o el Alavés le han cogido antes la temperatura a la Primera División, con mucho mérito en ambos casos, ya que los pepineros debutan en la categoría, y los vascos llevaban 10 años alejados de la LaLiga Santander, y han sido capaces de derrotar al Barcelona en el Camp Nou, sacar un valioso empate del Vicente Calderón, y estar a punto de lograr un resultado positivo en Mestalla ayer. No obstante, para Osasuna no está siendo un comienzo agradable. En los cinco partidos que han disputado, no han vencido en ninguna jornada, y llegan a El Madrigal con dos puntos de 15 posibles, y buscarán estrenarse en Vila-real.
Dos derrotas en casa y una en el Bernabéu
Si hay un elemento clave para que un equipo que aspira a salvarse logre el objetivo, es hacer de su estadio un fortín, algo que no está consiguiendo el equipo navarro en el arranque de campeonato, ya que en tres partidos como local, ha perdido dos y ha empatado otro. La primera derrota llegó en la segunda jornada frente a la Real Sociedad, en la que cayó por 0-2, con un tanto de Juanmi y otro en propia puerta de Unai García. La más reciente derrota ha tenido lugar anoche, cuando el Osasuna recibió al Espanyol, que tampoco había conseguido en Liga una victoria, por lo que el duelo pasaba a ser capital. Por desgracia para los rojillos, no consiguieron vencer.
Y la culpa la tuvieron dos ex amarillos, Baptistao y Gerard Moreno, que con sus goles dieron la victoria a los de Quique Sánchez Flores. El gol de Sergio León no tuvo recompensa, ya que el delantero catalán volvía a dar la ventaja, que acabaría siendo definitiva.
La otra derrota tuvo lugar en un escenario en el que lo normal para un equipo del perfil del navarro es cosechar una, el Santiago Bernabéu. Y lo cierto es que los rojillos maquillaron en la segunda parte el resultado, dado que el Real Madrid vencía por 5-0 en el minuto 62, con goles de Cristiano Ronaldo, Danilo, Sergio Ramos, Pepe y Modric, pero los goles de Oriol Riera y David García adornaron un poco el marcador al final del encuentro, que se cerró con 5-2.
Dos únicos puntos de dos empates
Quizá lo más curioso es que Osasuna no empezó mal el campeonato, ya que en la jornada inaugural, en su regreso a LaLiga Santander, cosechó un empate en un campo complicado como es La Rosaleda, en un encuentro en que los andaluces buscaban comenzar con buen pie la competición ante su afición, con un equipo renovado y con fichajes ilusionantes. Fran Mérida en el minuto 85 neutralizó en tanto inicial de Juanpi, y el encuentro acabó empate a uno.
El otro partido de esta liga en el que Osasuna ha conseguido sumar fue en la jornada cuarta frente al Celta en El Sadar, otro duelo importante, puesto que los gallegos no habían sumado todavía ningún punto, y venían de debutar en Europa League, lo que suponía un aliciente para los navarros, para tratar de obtener la tan ansiada primera victoria en la competición. Sin embargo, el encuentro terminó como empezó, con 0-0 en el marcador, resultado que no contentaba a ninguno de los dos equipos.
Este domingo, el Osasuna visita El Madrigal con la esperanza o el deseo de sumar por fin los tres primeros puntos en el campeonato nacional de liga española, pero delante estará uno de los cuatro conjuntos invictos en estas primeras cinco jornadas, y uno de los menos goleados, como es el Villarreal, por lo que la tarea se presume bastante complicada, al menos a priori.